El gigantesco monumento soviético a la “amistad” entre Rusia y Ucrania, desmantelado en Kiev
Las estatuas del Arco de la Amistad de los Pueblos, en el centro de la capital, han sido desmanteladas: “Es nuestro peor enemigo, por eso el monumento a la amistad ruso-ucraniana ya no tiene sentido”
En 1982, un monumento gigantesco se levantó en Kiev para conmemorar el 60 aniversario de la URSS. A orillas del río Dnieper, en el centro de la capital ucraniana, se erigió un gran arco de titanio con un diámetro de 50 metros y una altura de 35. A sus pies, una estela de granito y dos figuras de bronce de ocho metros de alto sobre un pedestal que representaban a un trabajador ucraniano y otro ruso. Cuarenta años después, los dos gigantes de bronce han sido desmantelados por las autoridades ucranianas, una alegoría de la destrucción total de la “amistad” entre los dos países que, desde el fin de la URSS y tras el reconocimiento de la independencia de Ucrania, han tenido una relación convulsa que ha desembocado en la invasión rusa del país.
Conocido como el Arco de la Amistad de los Pueblos, parte del monumento fue eliminado este martes por las autoridades de la ciudad en respuesta a la invasión de Moscú. Las estatuas bajo el arcoíris representaban a un trabajador ucraniano y otro ruso. Ambos sujetaban conjuntamente una medalla soviética, premio estatal conocido en la antigua URSS como la Orden de la Amistad de los Pueblos.
Los trabajos para desmontarlo comenzaron por las cabezas de bronce. Una de ellas cayó al suelo. El alcalde de la ciudad destacó en Telegram el “simbolismo” de este momento, asegurando que fue “el trabajador ruso el que perdió la cabeza”.
Según Klitschko, fue una labor difícil y los trabajadores tuvieron que arremeter contra los “cimientos del monumento”. Con una potente radial, los operarios cercenaron las estatuas a la altura de los pies de las figuras.
Mientras una grúa elevaba las estatuas y las dejaba en el suelo, en torno a un centenar de personas se había congregado en los alrededores mientras vitoreaba gritos de “¡Gloria a Ucrania!”. Después, muchos posaron junto a la cabeza decapitada.
El arquitecto principal del monumento, Serhiy Myrhorodsky, se mostró de acuerdo con el desmantelamiento de su obra. “Con Rusia, todo se ha acabado. Este monumento fue construido para conmemorar la reunificación con Rusia. Hoy deberíamos convertirlo en un monumento de la unificación de las tierras ucranianas. Quitarlo es absolutamente correcto”, dijo en declaraciones recogidas por EFE.
“Rusia invadió Ucrania, ¿podemos ser amigos de Rusia? Este es nuestro peor enemigo, por eso el monumento a la amistad ruso-ucraniana ya no tiene sentido”, añadió el arquitecto según Reuters.
Klitschko ha asegurado que el arco permanecerá en su lugar, pero que pasaría a llamarse Arco de la Libertad del Pueblo Ucraniano y a lucir los colores de la bandera del país. En un principio, se pensó también en desmantelarlo, pero el procedimiento sería bastante más complicado que el llevado a cabo con las estatuas por sus grandes dimensiones.
También se mantiene la estela de granito (de color marrón en las imágenes) que se encuentra bajo el arco, que representa a los participantes del Consejo Pereyaslav de 1654, que firmaron un tratado para proporcionar protección al estado cosaco de aquella época por parte del zar Alejo I.
El monumento se ha vuelto cada vez más controvertido a lo largo de los años a medida que aumentaban las tensiones entre los dos países.
En 2018 un grupo de ciudadanos pintó una grieta negra irregular que divide el arco en lo alto del monumento, llamada “grieta de la amistad”, que simboliza el deterioro de las relaciones entre Rusia y Ucrania.
Previamente, tras la victoria de Ucrania en el Festival de Eurovisión 2016 , y de cara a la celebración de Eurovisión 2017 en la ciudad de Kiev, el Arco se pintó temporalmente con los colores del arco iris y se renombró como Arco de la diversidad en homenaje a la comunidad LGTBI.
60 monumentos y calles renombradas
El Ayuntamiento de Kiev ha anunciado que retirará otros 60 monumentos y placas de la capital y renombrará 279 calles que actualmente están vinculadas de alguna manera a Rusia.
Bondarenko anunció que los ciudadanos de Kiev podrán enviar sus sugerencias para renombrar las calles y monumentos antes del 1 de mayo.
“Nadie tiene la intención de eliminar los libros de autores clásicos rusos de las estanterías de las bibliotecas o prohibir que la gente asista a conciertos de Rachmaninoff. Pero el asunto de los nombres de las calles y los monumentos debe cerrarse”, dijo el responsable consistorial.
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