Nikki Haley, exgobernadora de Carolina del Sur y exembajadora de Estados Unidos en la ONU, ha anunciado su candidatura para las elecciones a la presidencia de 2024 y se enfrentará a Donald Trump en las primarias del Partido Republicano.
“Algunas personas miran a EEUU y ven vulnerabilidad. La izquierda socialista ve una oportunidad para reescribir la historia. China y Rusia están en marcha. Todos ellos piensan que se nos puede intimidar, que se nos puede dar patadas”, dice Haley en el vídeo en el que anuncia su candidatura. “Deberían saber esto de mí: No soporto a los matones y cuando les devuelves la patada, les duele más si llevas tacones”.
Haley llevó durante dos años la política exterior del presidente Trump en la ONU, pero dejó el Gobierno en 2018. Desde entonces ha alabado algunas de sus políticas y ha mostrado algunas críticas para apelar a los republicanos moderados. Después del asalto al Capitolio, Haley dijo que “la historia juzgará con dureza” las acciones de Trump tras las elecciones. Sin embargo, se opuso a su destitución durante el impeachment.
“Los republicanos han perdido el voto popular en siete de las ocho últimas elecciones presidenciales. Eso tiene que cambiar”, afirma la candidata en el vídeo de campaña. En 2021, sin embargo, Haley dijo que no se presentaría si Trump fuera candidato.
“Es momento para una nueva generación de líderes, que redescubran la responsabilidad fiscal, aseguren nuestra frontera y fortalezcan nuestro país, nuestro orgullo y nuestros propósitos”, afirma Haley en su anuncio, en el que recuerda también que nació en el seno de una familia india: “Mi madre siempre decía 'tu labor no es centrarte en las diferencias, sino en las similitudes”.
Haley se convierte de momento en la única republicana que ha dado un paso al frente para disputar la candidatura presidencial republicana al expresidente Donald Trump (2017-2021), que ya informó hace meses de su intención de presentarse.