Es la segunda resolución en lo que va de año. La primera, reconoció a Juan Guaidó como presidente del país; la segunda, sigue en la misma línea, pero profundiza en un discurso diplomático que ha hecho que los socialdemócratas se desmarquen con la abstención: el texto apoya al Grupo de Lima, que lidera la oposición en América Latina a Nicolás Maduro y alguno de cuyos miembros se han mostrado muy alineados con Donald Trump –Colombia o Brasil, por ejemplo–.
Pero, además, el texto de la resolución critica al Grupo Internacional de Contacto liderado por la Unión Europea y que este mismo jueves mantiene su segunda reunión a nivel ministerial, esta vez en Quito (Ecuador). Y ni siquiera menciona otras iniciativas, como el Mecanismo de Montevideo, formado por países como México, Bolivia, Uruguay y los caribeños.
Del mismo modo, tampoco piden que no se produzca una intervención militar, algo que algunos de los actores principales, con Estados Unidos a la cabeza, no descartan.
Con 310 votos a favor, 120 en contra y 152 abstenciones, el pleno ha aprobado así la segunda resolución, pactada entre populares, conservadores y liberales, sobre Venezuela en lo que va de año –la décima desde el inicio de la legislatura–. Los eurodiputados condenan “la represión feroz y la violencia” y reiteran su “gran inquietud ante la grave situación de emergencia humanitaria en el país”.
“Venezuela afronta escasez de medicamentos y alimentos, violaciones masivas de los derechos humanos, hiperinflación, opresión política, corrupción y violencia”, señala el texto, que afirma que “el 87 % de la población vive en una situación de pobreza, y los recientes apagones han agravado una crisis sanitaria ya de por sí dramática”.
El eurodiputado del PSOE Ramón Jáuregui, que es copresidente de la Asamblea Parlamentaria UE- América Latina, ha afirmado: “La posición del Grupo PPE y de ALDE es irresponsable. Seguimos apoyando al Servicio Europeo de Acción Exterior (SEAE) y al Grupo de Contacto que integran la mayoría de los países europeos. La derecha política del Parlamento está negando lo evidente, y es que el único agente internacional que en estos momentos está hablando con gobierno y con oposición para la transición del régimen y para la convocatoria de elecciones es el Grupo de Contacto europeo, con el apoyo de algunos países de la región. Esta beligerancia contra la mediación es estúpida e incongruente”.
La Eurocámara “confirma su reconocimiento de Juan Guaidó como presidente interino legítimo de Venezuela y expresa apoyo total a su hoja de ruta, consistente en poner fin a la usurpación, instaurar un gobierno nacional de transición y celebrar elecciones presidenciales sin demora”. Los eurodiputados, además, piden a los Estados miembros que todavía no han reconocido a Guaidó “que lo hagan ya”.
El Parlamento reclama al “régimen ilegal de Maduro que ponga fin al acoso, las detenciones y toda forma de represión periodistas, políticos y miembros del entorno de Guaidó, incluido su jefe de gabinete, Roberto Marrero”. Y denuncia que “pese a que las ya limitadas existencias de alimentos en Venezuela corren el riesgo de estropearse, la ayuda humanitaria almacenada en Colombia y Brasil fue rechazada de manera brutal y, en algunos casos, destruida por el régimen”.
La resolución también menciona “la intensificación de la crisis migratoria en toda la región y reconoce los esfuerzos realizados y la solidaridad mostrada por los países vecinos. Los eurodiputados piden a la Comisión Europea que siga cooperando con dichos países no solo aportando asistencia humanitaria, sino también con más recursos”.
El pleno, así mismo pide “sanciones adicionales contra los activos de las autoridades estatales ilegítimas en el extranjero y las personas responsables de violaciones de los derechos humanos y de la represión”. Y sugiere “prohibir la concesión de visados y congelación de activos para esas personas y sus allegados”.
“Esta resolución condena la represión y la violencia en Venezuela, expresa una profunda preocupación por la gravísima emergencia humanitaria, condena el acoso a los periodistas, alerta de la crisis migratoria provocada en toda la región, pide más sanciones a los miembros del régimen de Maduro, apoya a Juan Guaidó como presidente interino legítimo, aboga por elecciones libres y rechaza la influencia desestabilizadora de agentes cubanos en Venezuela. Todo esto es lo que los eurodiputados del PSOE no han querido, lamentablemente, apoyar hoy”, ha afirmado el popular Estaban González Pons.