Era el mandato de la Comisión Europea geopolítica, pero no pudo ser más frágil la imagen de la Unión Europea en Ankara. Era el mandato del team Europe, pero no pudo ser más endogámica la actitud del presidente del Consejo Europeo, Charles Michel. Era el mandato de la UE con más mujeres en sus puestos de mando, pero el protocolo machista del presidente turco, Recep Tayyip ErdoÄan, colocó a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, en un lugar subalterno con la pasividad de quien tenía que ser su cómplice, el presidente Michel.
“He expresado mi pesar en varias ocasiones por la situación que se generó con la presidenta de la Comisión Europea y todos los que se han sentido ofendidos”, ha afirmado el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, este lunes ante el pleno del Parlamento Europeo, donde se ha llevado un rosario de críticas por parte de todos los grupos: “Sé que algunos consideran que tenía que haber actuado de otra manera. Pero no lo hice para no crear un incidente político que habría podido dar al traste meses de trabajo”.
Y como gesto hacia las mujeres, ha afirmado: “Estoy dispuesto a aceptar la propuesta de una cumbre sobre la igualdad de género”.
La presidenta de la Comisión Europea, por su parte, ha enunciado un vehemente discurso sobre el incidente del Sofagate: “Soy la primera mujer en ser presidenta de la Comisión Europea, y así es como esperaba se me tratara en nuestra visita a Turquía. Como una presidenta de la Comisión Europea. Pero no fui tratada así, no hay ninguna justificación. Se me trató así por ser mujer. ¿Qué habría pasado si hubiera ido con traje y corbata? Seguramente las mujeres aquí presentes habrán tenido experiencias similares. Me sentí humillada y sola, como mujer y europea. Nos afecta en el corazón de lo que somos, nuestros valores y cuán lejos hay que llegar para que a la mujer se la trate en pie de igualdad”.
Von der Leyen, en todo caso, reconoció que, a pesar de todo, está en “una posición privilegiada como líder, pero ¿qué pasa con los millones de mujeres que no están en esa posición, sin el poder ni el cargo para alzar su voz? Cuando llegué había cámaras, y gracias a ello el vídeo se hizo viral,. No hacían falta subtítulos ni traducción. Las imágenes hablaron por sí solas, pero hay incidentes mucho más graves que no saltan a la luz porque nadie les presta atención. Tenemos que asegurarnos de que este tipo de historias también se cuenten y haya acciones”.
La presidenta del grupo socialista en el Parlamento Europeo, Iratxe García, ha insistido: “Esa escena nos dice algo que sabemos muy bien: lo que nos cuesta romper los techos de cristal. Sé que no era su intención [dijo dirigiéndose a Charles Michel], que quizá no se dio cuenta del fallo de protocolo. Pero ese es el problema. Que no se dan cuenta. Eso es lo que hay que cambiar. No bastan las declaraciones, si bien aceptamos sus disculpas porque como europea me sentí ofendida. Si nos mueven las sillas, nosotras moveremos las conciencias”.
García ha pedido a Von der Leyen y a Michel “un esfuerzo para coordinar el protocolo en próximas ocasiones”. Además, ha señalado que los Tratados ya prevén una solución para la complejidad institucional de la UE, y es la figura del Alto Representante –Josep Borrell, en la actualidad–.
“No espero mucho del presidente Erdogan”, ha dicho la copresidenta de los Verdes, Ska Keller: “Se retira del Convenio de Estambul y no hace nada para proteger a las mujeres. Pero de usted, presidente Michel, sí habría esperado otra cosa. Si trata así a la presidenta Von der Leyen, ninguna mujer puede esperar un trato distinto por su parte”.
Y ha añadido: “La posición de la UE hacia el Gobierno turco ha sido muy débil. La situación de los derechos humanos en Turquía es catastrófica. La democracia y el Estado de Derecho se han deteriorado drásticamente. Y, sin embargo, el Consejo [los Gobiernos] está trabajando en un mandato para la modernización de la unión aduanera entre la UE y Turquía”.
Von der Leyen también ha expresado su “profunda preocupación por la retirada de Turquía del Convenio de Estambul, es una señal terrible, pero para ser creíbles no basta con criticar a otros, tenemos que actuar en casa. Hay Estados miembros que no han ratificado el Convenio y otros están pensando en retirarse. Esto no es aceptable, cualquier tipo de violencia contra la mujer y los niños es un crimen y debe ser castigado. Por eso quiero que la UE se adhiera al Convenio de Estambul, es una de las prioridades de mi Comisión. Pero como se está retrasando en el Consejo vamos a presentar una propuesta legislativa para prevenir y combatir la violencia contra las mujeres y los niños offline y online, y vamos a proponer ampliar la lista de delitos recogidos en los Tratados para que se incluyan estos delitos”.
El vicepresidente de los populares en el Parlamento Europeo, Esteban González Pons, ha sido duro con Charles Michel: “Se le dejó sin silla por ser mujeres. El señor Michel nunca debería haber aceptado esa silla dejando a Von der Leyen de pie. Es un terrible ejemplo de cultura machista: los hombres primero”.
“Tenemos 31 instituciones haciendo política exterior: 27 gobiernos nacionales, el Consejo, la Comisión Europea, el Alto Representante de Política Exterior y Seguridad Común y, a veces, el Parlamento Europeo también. Esto no es política exterior, esto es un manicomio”, ha añadido González Pons.
“Los derechos humanos son indivisibles e inalienables”, ha añadido Von der Leyen para cerrar el debate: “En algunas partes de Europa las niñas no podían jugar al fútbol, en caso de divorcio siempre se le acusaba a la mujer, y cuando tuve mis primeros hijos, era normal que no hubiera asistencia en el hogar y a la mujer se le acusaba de ser mala madre por querer trabajar fuera de casa. Han pasado siglos para que la violación en el matrimonio sea delito en el Código Penal. Esto es Europa, y en otras partes del mundo es más difícil. Hemos avanzado, pero queda mucho por recorrer. Seguiré luchando por la igualdad de derechos de todas las personas, por una Europa que hable con una sola voz”.
El presidente del Consejo Europeo ha cerrado el debate “lamentando lo ocurrido. Voy a aumentar el compromiso para que el orgullo europeo del Estado de Derecho esté en lo más alto. Soy padre de dos hijas, y para ellas sueño un mundo en el que la igualdad sea una realidad cotidiana. Y por eso he expresado que quiero coger la mano tendida por varios diputados, sin olvidar el respeto de las instituciones, para avanzar. Ursula, puede contar con mi determinación para hacer todo lo posible. Estamos orgullosos de que la UE tenga una presidenta de la Comisión Europea, del BCE, y que haya una europea al frente del FMI”.
“La imagen es vergonzosa, pero en Turquía hemos defendido los mismos mensajes sobre los derechos humanos y de las mujeres”, ha insistido Michel.