“¿Es cierto que tiene una pareja del mismo sexo? ¿Estás de broma?”, dice sorprendida una votante al descubrir que el ganador de los caucus de Iowa, Pete Buttigieg, no es heterosexual. “No quiero a nadie así en la Casa Blanca”, sentencia esta mujer de mediana edad en un vídeo difundido en Twitter.
“¿Puedo retirar mi voto?”, pregunta. “Yo no sabía nada de eso”, espeta, a lo que su interlocutora, Nikki van den Heever, la líder de distrito para la campaña del caucus de Iowa de Buttigieg, responde: “Es un ser humano, como tú y como yo, no debería importar”. La votante contesta que Buttigieg “debería leer la Biblia”.
Tras un breve debate sobre la interpretación sobre términos bíblicos, Van den Heever zanja la discusión explicando que ella también es cristiana y que lo que enseña a su hijo, situado junto a ella, es que “el amor es amor, y todos somos seres humanos”. El político está casado con Chasten Buttigieg desde junio de 2018, con quien ha aparecido en numerosos actos públicos.
La votante ha sido duramente criticada en las redes sociales por promover un discurso homóbofo. De momento, tanto ella como Van den Heever han preferido no responder a ningún medio estadounidense, según recoge CNBC.
Con un 71,44% del escrutinio y a falta de conocer el recuento final, Buttigieg figura como el ganador de los caucus de Iowa, una sorpresa que evidencia que el joven alcalde centrista de una ciudad pequeña de Indiana puede vencer a figuras nacionales como senadores y a todo un exvicepresidente. Su estrategia de patearse pequeños pueblos por todo el estado ha dado fruto y llega reforzado a la segunda cita, New Hampshire.