Agentes de policía de California mataron a tiros el pasado sábado por la noche a un rapero de 20 años que estaba dormido en su coche frente a un restaurante de la cadena Taco Bell, según han informado las autoridades.
Seis agentes de Vallejo dispararon “numerosas veces” al hombre, identificado por su familia como Willie McCoy. Según el Departamento de Policía, McCoy estaba armado cuando los agentes le dispararon por “temor a su propia seguridad”. El martes, la familia de McCoy, cuyo nombre artístico en el mundo del rap era Willie Bo, acusó a la policía de racismo contra el joven afroamericano, argumentando que no había razón para utilizar la fuerza contra alguien que estaba durmiendo y no representaba ninguna amenaza.
“No hicieron ningún intento de encontrar una solución pacífica”, cuenta a The Guardian Marc McCoy, hermano mayor de Willie. “El trabajo de la policía es arrestar a las personas que violan la ley, no tomarse las justicia por su mano. No son jueces, jurado y verdugos. Nosotros nunca superaremos esto”.
La policía ha afirmado que los agentes se acercaron a ver a McCoy después de que un empleado de Taco Bell llamase al número de emergencias el sábado alrededor de las 22:30 horas y dijese que un hombre se había “desplomado” sobre el volante de su coche frente al restaurante. McCoy no respondía y tenía un arma sobre las piernas, indica la policía, añadiendo que las puertas del coche estaban bloqueadas y el coche estaba encendido. Los agentes pidieron refuerzos y McCoy se movió “repentinamente”, señalaron los agentes en un comunicado.
La policía señaló que los agentes le dijeron que “mantuviera las manos donde las pudieran ver”, pero que el hombre movió rápidamente las manos hacia el arma. La policía afirmó que los seis agentes dispararon durante unos cuatro segundos, pero no dieron detalles de cuantas balas impactaron sobre McCoy. La policía continuó gritándole órdenes antes de sacarlo del coche y “pedir asistencia médica”. McCoy murió en el acto. Las autoridades todavía no han confirmado su identidad y no se ha realizado la autopsia.
El asesinato de McCoy se suma a numerosos escándalos de brutalidad policial contra la comunidad afroamericana en la ciudad de Vallejo, ubicada unos 50 kilómetros al noreste de San Francisco. Un vídeo de 2017 mostraba a un agente de Vallejo montándose a horcajadas sobre un hombre en el suelo y pegándole repetidamente en el rostro. El año pasado se hizo viral otro vídeo de un arresto violento en el que un agente le pegaba con una linterna o una porra a un hombre que estaba en el suelo. El mes pasado, un veterano de los Marines acusó a un agente de la policía de Vallejo de atacarlo mientras filmaba el arresto de su primo.
“Nadie confía en la policía de Vallejo”, señala David Harrison, primo de McCoy. “Nos hemos convertido en un blanco…La policía está llevando a cabo una campaña de asesinatos de jóvenes negros que tienen cierto perfil. Willie cuadraba con el perfil. Él representaba a la música hip hop y los músicos afroamericanos son un objetivo de la policía”.
Marc, hermano de Willie de 50 años, sospecha que la policía asustó a Willie para que se despertara y que deberían haberlo despertado con un megáfono en lugar de acercarse y finalmente dispararle cuando se despertó.
“La policía está entrenada para disparar y herirte primero”, denuncia. “No respetan a los negros. Incluso cuando ya han reducido a una persona y ellos ya no corren ningún peligro, continúan con la violencia física. Y esto en Estados Unidos es aceptable”, añade.
Willie tuvo una infancia difícil. Marc cuenta que sus padres murieron cuando él era pequeño, y añade: “Era muy ambicioso con su música. Esa era su pasión”. Willie rapeaba en un grupo llamado FBG. Vallejo ha sido cuna de muchos raperos y músicos exitosos.
Harrison afirma que a Willie le encantaba pasar tiempo con sus sobrinos y sobrinas y hacer música con sus familiares. Y añade que trataba a sus amigos como si fuera su familia: “Si necesitabas dinero, él estaba allí. Si necesitabas que te llevaran en coche a algún sitio, él estaba allí”.
Marc asegura que algunos de los familiares de Willie están tan consternados que “no pueden siquiera hablar de ello. Están encerrados en la casa, llorando hasta quedarse dormidos”.
En la región de la bahía de San Francisco hubo dos notorios casos en que la policía disparó contra un hombre tras despertarlo, generando denuncias por la violación de los derechos civiles. El año pasado, cuatro agentes de Oakland mataron a tiros a un hombre sin techo que estaba armado y dormía entre dos casas. La semana pasada, la familia del hombre presentó una denuncia por uso excesivo de la fuerza, según el periódico San Francisco Chronicle.
En 2015, la policía de Oakland mató a un hombre que se había desmayado en su coche. Los agentes argumentaron que el hombre de pronto se despertó y quiso coger un arma que se encontraba en el asiento del acompañante. La familia logró un acuerdo extrajudicial por el que recibieron más de un millón de Dólares.
La familia de Willie pide que los agentes involucrados en el caso sean juzgados. “No podemos entender por qué tuvieron que dispararle. No tiene sentido…dispararle a un hombre que está dormido en su coche”, señala Harrison. “Queremos asegurarnos de que esto no le suceda nunca más a nadie”.
Traducido por Lucía Balducci