Elly Schlein, nombrada líder del Partido Democrático y primera mujer en encabezar la formación progresista italiana

La principal formación progresista de Italia ha elegido por primera vez a una mujer para dirigir el partido. En contra de lo que pronosticaban las encuestas, Elly Schlein, de 37 años, se impuso el domingo a Stefano Bonaccini en la carrera por el liderazgo del Partido Democrático.

“El Partido Democrático está vivo y dispuesto a levantarse”, dijo Schlein. “Lo hemos conseguido, hemos hecho juntos una pequeña gran revolución y no nos han visto venir”.

La ex eurodiputada Schlein dijo que su partido, al que le ha costado ejercer una oposición sólida contra la derecha italiana, “va a representar un problema” para el Gobierno de Giorgia Meloni, líder del partido de raíces neofascistas Hermanos de Italia.

Schlein saltó a la fama a principios de 2020 cuando su pequeño partido, Coraggiosa (Valiente), jugó un papel fundamental para impedir que la extrema derecha se hiciera con el poder en Emilia-Romaña, una región tradicionalmente de izquierdas. Bonaccini ganó la presidencia de la región y Schlein fue nombrada vicepresidenta, un cargo que abandonó cuando fue elegida diputada en las elecciones generales de septiembre.

De nacionalidad italiana y estadounidense y conocida por su interés en los temas de justicia social, a Schlein la comparan en Italia con la congresista estadounidense por Nueva York Alexandria Ocasio-Cortez. Se ha reincorporado al Partido Democrático después de que en 2015 lo abandonara, frustrada por el rumbo que entonces seguía bajo la dirección del entonces primer ministro Matteo Renzi.

En una entrevista de septiembre con el periódico The Guardian, Schlein dijo que “no podía soportar” más al PD después de que Renzi pusiera en vigor su emblemática ley de trabajo con medidas que facilitaban a los empresarios el despido y los contratos precarios.

En la carrera por el liderazgo del partido, algunas de las prioridades de Schlein han sido el salario mínimo, la sanidad y el medioambiente. Toma el relevo de Enrico Letta, que en septiembre anunció su dimisión como dirigente del PD tras las elecciones que llevaron a Meloni al poder.

La victoria de Schlein ha sido una sorpresa porque las encuestas daban a Bonaccini una ventaja clara en su victoria. “Lo primero que pido es aplaudir a Elly Schlein”, dijo Bonaccini. “He hablado con ella y la he felicitado, [le deseo] mucha suerte para la gran responsabilidad que asume al frente del partido; Elly ha ganado y estoy a su disposición para ayudar”.

Muchos en la izquierda confían en que Schlein revitalice al PD, cuya popularidad en las encuestas oscila en torno al 17%, y se convierta en una rival viable para Meloni, una líder querida cuyo partido, Hermanos de Italia, no ha dejado de ganar fuerza desde que llegó al poder en un gobierno de coalición con la Liga, de Matteo Salvini; y Forza Italia, de Silvio Berlusconi.

“Trabajaremos juntos por el interés del país”, dijo Schlein. “Trabajaremos por la unidad, mi compromiso es ser la líder de todos, volver a ganar”.

Traducción de Francisco de Zárate