Erdogan pide a Europa que acoja a más refugiados sirios

El presidente turco ha señalado la necesidad de que la Unión Europea asuma parte de los casi tres millones de refugiados sirios que Turquía acoge en estos momentos. Su petición se produce poco después de que el principal grupo que hace campaña a favor del Brexit haya insinuado que los inmigrantes turcos representarán una amenaza si este país es admitido en la Unión Europea. 

Recep Tayyip ErdoÄŸan ha señalado que Europa no está haciendo lo suficiente por ayudar a Turquía, que se ha convertido en el país del mundo que acoge a un mayor número de refugiados. La guerra civil en Siria obligó a más de 2,7 millones de personas a dirigirse hacia el norte del país y cruzar la frontera con Turquía. 

El presidente ha hecho este comentario al confirmar a Binali Yıldırım como nuevo primer ministro, tras la destitución de Ahmet DavutoÄŸlu a principios de mes por su supuesto bloqueo de las aspiraciones de ErdoÄŸan. Yıldırım, un viejo aliado, ha prometido otorgar mayores competencias a la oficina del presidente y limitar los poderes del primer ministro. 

Con sus comentarios sobre la gestión de la crisis de los refugiados, ErdoÄŸan podría avivar las llamas de un debate que se está produciendo en el Reino Unido, donde uno de los grupos que hace campaña a favor del Brexit asegura que el país tendrá que hacer frente a un enorme flujo de inmigrantes turcos si los británicos votan a favor de la permanencia y Turquía es admitida en la Unión Europea.

En una columna de opinión publicada en The Guardian, ErdoÄŸan quiso que los lectores británicos centraran su atención en un tipo de migración muy diferente; la de los refugiados sirios. Turquía espera que los países de Occidente, entre ellos el Reino Unido, redoblen sus esfuerzos y se ofrezcan a acoger a parte de los refugiados sirios que en estos momentos se encuentran en Turquía, especialmente después de que este país aceptara en marzo readmitir a los solicitantes de asilo que habían salido de este país hacia Grecia y que una vez llegaron allí no pudieron seguir su viaje hacia el centro y el norte de Europa. 

“Cuando la guerra en Siria entra en su sexto año, pedimos al mundo que esté a la altura de este desafío y cree un mecanismo justo para que todos compartamos esta carga”, escribió ErdoÄŸan. 

“Para que la inmigración ilegal esté bajo control, la Unión Europea y Turquía deben trabajar unidas para crear mecanismos legales, como el acuerdo de marzo de 2016, que permitan el reasentamiento de los refugiados sirios. Si recompensamos a los refugiados que han respetado las normas y dejamos claro que los inmigrantes ilegales que intenten entrar en Europa serán retornados a Turquía, podremos convencer a los refugiados para que no arriesguen sus vidas en alta mar”.

La oficina de ErdoÄŸan no ha precisado la cifra de refugiados sirios que Occidente debería acoger, pero un diplomático turco avanzó a The Guardian la semana pasada que Turquía espera que la Unión Europea se quede con al menos medio millón de personas. 

En un discurso pronunciado durante la conferencia sobre migración celebrada en Estambul, Esen AltuÄŸ, el director adjunto de migración, asilo y visados indicó que “Turquía ya acoge a 3 millones de refugiados sirios e iraquíes. Hasta la fecha, los canadienses se han quedado con 2.000. Lamentablemente, los países europeos se han quedado con un número muy reducido, insignificante, de refugiados. Así que queremos que acojan a unos 500.000 refugiados. Evidentemente, tiene que ser un programa voluntario; las familias sirias tienen que querer vivir en Europa”.

El llamamiento de ErdoÄŸan se produce pocos días después de que la Unión Europea haya reconocido que desde el acuerdo de marzo, solo 177 sirios que vivían en Turquía han sido admitidos en un país europeo. 

También ha hecho coincidir sus declaraciones con el inicio de la Cumbre Mundial Humanitaria que se ha celebrado este lunes y martes en Estambul, un evento auspiciado por las Naciones Unidas y en el que participan 175 países y representantes de miles de organizaciones que prestan asistencia y que tienen la esperanza de reformar el sistema.

La cifra de personas que necesitan ayuda humanitaria, unos 130 millones, es más alta que nunca. En un contexto en el que las organizaciones de ayuda humanitaria no disponen de los recursos suficientes y la legislación internacional pierde fuerza, las Naciones Unidas quieren que la comunidad internacional acuerde unos nuevos criterios internacionales para la ayuda humanitaria. 

Como anfitrión de la cumbre, ErdoÄŸan ha mostrado mucho interés en que se alcancen estos objetivos: “La Cumbre Mundial Humanitaria quiere abordar estos problemas, corregir las imperfecciones del sistema y conseguir un compromiso a largo plazo que nos permita desarrollar nuevas capacidades”, ha subrayado: “Por primera vez, los jefes de Estado y de gobierno, las organizaciones no gubernamentales, el sector privado y aquellos que se han visto afectados por las crisis humanitarias unirán fuerzas para buscar soluciones”.

Un encuentro para nada 

Sin embargo, los más críticos temen que este encuentro no sirva para nada. La ONG Médicos sin Fronteras (MSF) ha señalado que esta cumbre es “una hoja de parra” que sirve para ocultar los fracasos de la comunidad internacional y Oxfam la ha descrito como “una tertulia muy cara”. Algunos creen que el papel que desempeña Turquía es una buena muestra de los defectos de la cumbre. El país anfitrión reprime a los medios de comunicación de la oposición. Algunos críticos señalan que el trato que Turquía ha dado a los refugiados no es tan generoso como los políticos turcos quieren hacer creer. 

MSF ha decidido no participar en el encuentro, indicando que ya no confía en que los líderes mundiales tengan un deseo real de asumir ningún compromiso vinculante. Vickie Hawkins, la directora de MSF en el Reino Unido, afirma que no es descabellado pensar que los mismos países que están eludiendo sus obligaciones con los refugiados afirmen lo contrario la semana próxima. 

“Estas contradicciones nos superan”, explica Hawkins: “No creemos que la conferencia vaya a servir para cambiar la situación. Hay buenas intenciones pero también mucha retórica vacía. Y creemos que para abordar el actual incumplimiento de la legislación internacional necesitamos mucho más que palabras”.

Equality Now, un grupo que defiende los derechos de las mujeres, se pregunta cómo se puede confiar en unos líderes que asumen nuevos compromisos cuando todavía no han cumplido las promesas pasadas que les hicieron a las mujeres. “Que los gobiernos asuman compromisos es un paso positivo pero solo si después se traducen en un cambio”, afirma Brendan Wynne, portavoz de Equality Now. “Todavía esperamos que cumplan con los innumerables compromisos que adquirieron en la Conferencia de Pekín de 1995 y en otras cumbres”. 

La ministra de Desarrollo Internacional de Canadá, Marie-Claude Bibeau, está convencida de que la conferencia ya ha propiciado un cambio: “Lo importante no es lo que va a pasar en los próximos días sino todo el trabajo que se ha hecho antes del encuentro y todo el que se hará después”.

Bibeau, cuyo gobierno ha permitido la entrada de 25.000 refugiados sirios, se ha sumado al llamamiento de ErdoÄŸan y es partidaria de que otros países ayuden a Turquía: “Todos tenemos que aportar la parte de esfuerzo que nos corresponde”. 

Traducción de Emma Reverter