Tras las declaraciones de Donald Trump, que dijo hace unas semanas que Nueva Zelanda está lidiando con un “gran aumento” de nuevos casos de COVID-19, los neozelandeses han respondido con ironía en las redes sociales bajo el hashtag #NZhellhole (Nueva Zelanda, un infierno), que se ha posicionado como segundo trending topic en el país isleño.
A mediados de agosto, el presidente de Estados Unidos comenzó a mencionar a Nueva Zelanda en sus discursos de campaña, argumentando que el país norteamericano no era el único que luchaba contra la COVID-19. Sus palabras sobre los nuevos casos en la ciudad neozelandesa de Auckland tras más de 100 días sin transmisión comunitaria fueron burlonas. Tampoco eran ciertas: el día que hizo los comentarios por primera vez, Nueva Zelanda registró nueve casos nuevos de COVID-19, mientras que EEUU notificó casi 42.000.
“¿Visteis lo que pasó en Nueva Zelanda? Vencieron al virus y fue noticia de portada porque querían demostrarme algo”, dijo Trump en un mitin en el aeropuerto de Mankato, Minnesota. “El gran aumento en Nueva Zelanda sabemos que es terrible y no queremos eso”.
La primera ministra, Jacinda Ardern, contestó a las afirmaciones de Trump con un aluvión de estadísticas que desacreditaban su referencia a un “gran aumento”. Dijo que las situaciones en los dos países “no eran comparables” cuando solo 22 personas en ese momento que habían muerto por COVID-19 en Nueva Zelanda, en comparación con más de 170.000 en Estados Unidos, la cifra de fallecimientos más alta del mundo.
“No es solo si tienes casos, sino cómo eliges tratarlos como nación, y personalmente estoy muy orgullosa de cómo los neozelandeses se han enfrentado a la batalla contra la COVID-19”, dijo Ardern.
Los neozelandeses se lanzaron a las redes sociales y comenzaron a tuitear imágenes de la reconocida belleza del país, utilizando el irónico hashtag #NZhellhole (Nueva Zelanda, un infierno). La gente tuiteó los Alpes del Sur, Hobbiton y Milford Sound, así como imágenes más íntimas de sus jardines primaverales, playas locales y pícnics del Día del Padre. En los mensajes, quejas irónicas sobre el aire fresco, la falta de tráfico y el canto de los pájaros.
Miles de personas se han unido, y el hashtag ha sido tendencia repetidamente en Twitter en Nueva Zelanda durante el último mes. La popularidad de #NZhellhole puede estar ayudando a los neozelandeses a disfrutar y apreciar sus propios jardines, mientras las fronteras permanecen firmemente cerradas y muchos tienen que adaptarse a un estilo de vida más confinado y doméstico.
Por su parte, Trump todavía no ha dado muestras de haber visto las publicaciones, pero ha sido etiquetado en muchas de ellas.