La circunscripción alemana que ha ocupado Angela Merkel durante los últimos 30 años se ha decantado por una política de 27 años del Partido Socialdemócrata (SPD), el ejemplo más radical del cambio de guardia generacional que se ha dado en las eleciones generales del domingo.
La canciller saliente había ganado un mandato directo [el sistema electoral da al ciudadano dos votos, el primero de ellos a un candidato de distrito] en el distrito electoral de Vorpommern-Rügen - Vorpommern-Greifswald I una vez tras otra desde que se creó tras la reunificación en 1990.
Pero Anna Kassautzki, la que será su sucesora en la circunscripción, no viene de su partido sino del SPD, su rival histórico. Kassautzki se ha hecho con el escaño de la costa báltica al conseguir el 24,3% de los primeros votos, mejorando en 12,7 puntos porcentuales los resultados de su partido.
“Un honor increíble”
Georg Günther, el auditor fiscal de 33 años sucesor de Merkel en el distrito, ha quedado en segundo lugar con el 20,4% de los primeros votos.
“Es un honor increíble para mí”, ha dicho Kassautzki. “Ha sido un trabajo de equipo”. Nacida en Heidelberg en 1993, es líder de distrito del movimiento de los Jóvenes Socialistas y trabaja en la Universidad de Greifswald dirigiendo un equipo de servicios de apoyo a las familias.
Kassautzki ha declarado que luchar contra la injusticia social es una de sus motivaciones y en su biografía de Twitter se describe como europea y feminista comprometida. “Si queremos que nuestro país avance, en vez de cortejar al 10% de los que están arriba, debemos pedirles que paguen más”, decía en su página web de campaña.
Un triunfo sintomático
El triunfo de esta joven de 27 años es sintomático de un cambio de poder más amplio que se ha dado en el noreste de Alemania, donde el SPD ha conseguido darle la vuelta a todas las circunscripciones en los estados de Brandenburgo y Mecklemburgo-Pomerania Occidental, además de ganar en las elecciones estatales de este último Land y en Berlín.
El partido de los Verdes, que antes solo tenía un representante con mandato directo, consiguió ampliar a 16 su número de candidatos elegidos de forma directa, tras conseguir escaños improbables en bastiones conservadores como Múnich y como el suroeste de Baden-Württemberg.
En la próxima legislatura, el Bundestag tendrá por primera vez a dos diputadas transgénero tras el aumento del porcentaje obtenido por los Verdes en el segundo voto. Tessa Ganserer y Nyke Slawik entrarán en el Parlamento a través de las listas del partido.
Slawik ha escrito en Twitter que casi no puede creerse la victoria y que confía en que “se abra un nuevo capítulo de autodeterminación en la política y que se pueda poner fin a la condescendencia de años con las personas queer”.