Turín quiere ser la primera ciudad vegetariana de Italia

Stephanie Kirchgaessner

Del vitello tonnato –ternera con salsa de atún– al brasato al Barolo –ternera guisada con el vino tinto más famoso de la región de Piamonte–, los platos de carne llevan siglos siendo una parte esencial de la tradición gastronómica del norte de Italia.

Pero Chiara Appendino, la nueva alcaldesa de Turín y una figura relevante en el populista Movimiento 5 Estrellas (M5S), podría estar a punto de cambiar todo eso con la promesa que ha hecho esta semana de promover las dietas vegetariana y vegana como “prioridad” de su gobierno.

Según el programa de 62 páginas del M5S –que también pide una planificación urbanística mejor y la protección de los terrenos públicos–, la nueva alcaldesa de Turín considera que el apoyo a la vida sin carne e incluso sin productos lácteos es fundamental para la protección del medio ambiente, la salud y el bienestar de los animales. Aunque aún no se han desvelado los detalles de esa estrategia, se espera que la ciudad ponga en marcha proyectos educativos en las escuelas para enseñar a los estudiantes contenidos sobre bienestar animal y nutrición.

La iniciativa no tiene precedentes en los gobiernos municipales de Italia, pero encaja con el punto de vista del euroescéptico M5S. El partido abraza algunos valores progresistas como el ecologismo, la conservación de la naturaleza y la energía verde, pero se muestra ambiguo en temas como las migraciones y no apoyó una propuesta reciente de dar a los italianos LGTB el derecho a adoptar niños.

Este mes, Luigi di Maio, vicepresidente del Parlamento italiano y posible líder del M5S para las próximas elecciones generales, celebró los 30 años que cumplió comiéndose una tarta vegana. Aunque Beppe Grillo, fundador del M5S y antiguo humorista, ha dicho que comer carne forma parte de su naturaleza, su exitoso blog ha elogiado en algunas ocasiones la dieta vegetariana. Esto incluye una publicación sobre el documental Cowspiracy, producido por Leonardo Di Caprio, y una que promovía el vegetarianismo en las guarderías.

La sorprendente victoria de Appendino en junio, cuando derrotó cómodamente al entonces alcalde demócrata Piero Fassino, ha convertido a esta política de 31 años en una estrella del M5S. Pero el grito de guerra contra la carne de esta nueva alcaldesa aún podría salirle por la culata.

La noticia de la propuesta fue recibida con algunas burlas en Twitter, donde acusaron a Appendino de intentar crear un Estado paternalista. “Si no haces caso (a la propuesta de la alcaldesa) en Turín, te irás a la cama sin cenar”, decía un tuit. Otro crítico señalaba que el programa de la alcaldesa no menciona a la industria, a pesar de que Turín ha sido siempre la sede de las fabricantes de coches Fiat y Alfa Romeo y se considera el núcleo industrial de Italia.

Stefania Giannuzzi, la nueva concejala de Medio Ambiente designada por Appendino que dice que lleva 20 años siendo vegetariana, defiende que la promoción del vegetarianismo no busca un enfrentamiento con los productores de carne del Piamonte.

“No me gustaría generar un choque con la industria de la carne. No queremos cerrar los pequeños comercios ni arruinar a la gente que lleva años trabajando para desarrollar el patrimonio de la comida y el vino del Piamonte”, ha afirmado Giannuzzi en el Corriere della Sera.

Pero el M5S podría estar subestimando el desafío que afronta en Turín. El año pasado, cuando la Organización Mundial de la Salud consideró cancerígenas las carnes procesadas como el jamón, las salchichas y el salami, los productores de carne de Italia cargaron contra esa clasificación y la llamaron “terrorismo contra la carne”.

Traducción de Jaime Sevilla Lorenzo