Rashida Tlaib, congresista demócrata a la que Israel ha permitido este viernes la entrada al país pese a una prohibición inicial, ha rechazado la oferta y ha declarado que no visitará a “su abuela bajo esas opresivas condiciones”.
“Que me silencien y me traten como a una criminal no es lo que ella quiere. Eso mataría una parte de mí. He decidido que visitar a mi abuela bajo esas opresivas condiciones va en contra de lo que yo creo: luchar contra el racismo, la opresión y la injusticia”, ha declarado la congresista en un tuit.
Tlaib había sido vetada junto a Ilhan Omar porque, según Israel, “apoyan el boicot al país”. Tras esta prohibición, la congresista pidió al país permiso por motivos humanitarios para visitar a su abuela nonagenaria, que se encuentra en territorio palestino ocupado de Cisjordania.
El Ministerio de Interior, que encabeza Arie Deri, aprobó la petición de una visita humanitaria de Tlaib y afirmó que esta “envió anoche una carta al ministro Deri en la que prometió cumplir las peticiones de Israel, respetar los límites impuestos a su visita y afirmó que no promovería el boicot contra Israel durante la misma”, aseguró un comunicado difundido por el diario Haaretz.
Tlaib, hija de palestinos, escribió este jueves una breve misiva a Deri en la que decía: “Me gustaría pedir admisión a Israel para visitar a mis familiares, específicamente mi abuela, que tiene más de noventa años y vive en Beit Ur Al Fouqa. Esta podría ser mi última oportunidad de verla. Respetaré cualquier restricción y no promoveré boicots contra Israel durante mi visita”.
Trump: sería una “muestra de debilidad” recibirlas
El veto a ambas demócratas llegó después de que Donald Trump dijese en su cuenta de Twitter que sería una “muestra de debilidad” recibirlas. “Israel mostraría una gran debilidad si permitiera la visita de las representantes Omar y Tlaib. Odian a Israel y a todo el pueblo judío, y no hay nada que pueda decirse o hacerse para que cambien de opinión”.
La prohibición se conocía a través de un comunicado del Ministerio del Interior de Israel, en el que se aseguraba que tanto el ministro del Interior, Arie Deri, como el primer ministro en funciones, Benjamín Netanyahu, y el ministro de Asuntos Estratégicos, Guilad Erdan, se habían puesto de acuerdo en esa decisión.
“La decisión se tomó después de que el ministro Deri se diese cuenta de que se trataba de una actividad de boicot contra Israel y que debía impedir que entrasen, de acuerdo a la Ley Israelí de Entrada”, al considerar que las congresistas demócratas usan su visibilidad para “apoyar a las organizaciones de Boicot, Desinversión y Sanciones que llaman a boicotear a Israel”, declaran.
La nota oficial asegura que Israel “respeta al congreso de Estados Unidos” pero al mismo tiempo considera “inconcebible” permitir la entrada al país a alguien que “quiere hacer daño a Israel”.
Críticas desde la oposición
La postura tomada por el Gobierno ha sido criticada por miembros de la oposición, que entienden que supone un enfrentamiento del Ejecutivo con el Partido Demócrata estadounidense.
“Un estado que no tiene nada que esconder no consideraría restringir la entrada de ambas congresistas”, criticó Aiman Odeh, diputado y líder de la coalición árabe-israelí Lista Conjunta, informó el digital Times of Israel.
Nitzan Horowitz, miembro del partido pacifista Meretz y de la coalición de izquierdas Campo Democrático, cree, por su parte, que el veto a las congresistas no forma parte de “una confrontación con el Partido Demócrata, que siempre ha apoyado a Israel”, y se mostró preocupado de que las autoridades israelíes “lidien con las críticas a partir de vetos de entrada o salida”.
Omar, nacida en Somalia y representante por Minnesota, y Tlaib, hija de palestinos y congresista por Michigan, han cuestionado duramente a Israel e instado a empresas, artistas y universidades a boicotear al Estado judío.
El Canal 13 de noticias israelí informó esta semana de que el presidente Donald Trump habría pedido a Netanyahu negar la entrada de las congresistas con quienes -junto con la latina Alexandria Ocasio-Cortez y la afroamericana Ayanna Pressley- mantiene fuertes encontronazos.
Trump acusó en julio a las conocidas como “La brigada” (The squad) - Tlaib, Omar, Ocasio-Cortez y Pressley - de odiar a Estados Unidos e Israel y les instó a regresar a los lugares de donde vinieron, pese a que tres de ellas son nacidas en EE.UU.
La llegada de las dos representantes estadounidenses estaba prevista para este domingo y se esperaba que Tlaib se quede unos días más en Cisjordania, donde reside su abuela.
La ley israelí contra el boicot, aprobada en 2017, permite negar el ingreso a cualquier ciudadano extranjero que llame públicamente a boicotear a Israel.