El alcalde de Mariúpol, Vadim Boychenko, calcula que las fuerzas del Kremlin han deportado por la fuerza a territorio ruso o controlado por Rusia a entre 20 y 30 mil personas de esa localidad portuaria, aunque admite que son solo estimaciones de acuerdo a los recuentos elaborados por su Consistorio.
En una entrevista con la agencia ucraniana Unian, publicada este domingo, Boychenko ha afirmado que ya han conseguido evacuar al 50% de la población de la ciudad, que contaba con 540.000 habitantes antes de la guerra. “Tan pronto como comenzó la guerra, y mientras el ferrocarril todavía estaba en funcionamiento, mientras los caminos ordinarios todavía estaban en funcionamiento, se fueron unos 140.000. Más tarde, 60 mil fueron sacados de manera organizada por los corredores acordados, con la ayuda de voluntarios”. El alcalde ha añadido que las personas que están en las cercanías de la ciudad también requieren evacuación.
En los últimos días, los corredores humanitarios no han funcionado directamente desde Mariúpol sino que se han desplegado entre la ciudad de Berdianks hasta Zaporiyia, esta última todavía bajo control ucraniano. Los habitantes de Mariúpol se están desplazando hasta Berdianks en sus automóviles o a pie y, desde allí, son trasladados en convoyes de autobuses y corredores centralizados. “Desde el 25 de marzo, 48 autobuses han ido llevando a los residentes de Mariúpol desde esa ciudad hasta Zaporiyia. Hemos conseguido evacuar así a 3,5 mil personas”, ha explicado.
Boychenko también ha detallado el nivel de destrucción de las infraestructuras de la ciudad, sitiada desde hace semanas por las tropas rusas y sometida a constantes bombardeos. Según los cálculos del alcalde, un 90% de las viviendas civiles ha quedado dañado de una u otra forma, más de 2.600 casas. De ellas, el 60% ha sufrido el impacto de obuses o misiles rusos y el otro 40 ya no es recuperable.
Informa Marta Plazuelo.
El presidente turco, Tayyip Erdogan, ha hecho llegar este domingo a su homólogo ruso, Vladímir Putin, en una llamada telefónica la necesidad un alto el fuego y mejores condiciones humanitarias tras la invasión de Ucrania por parte de Moscú, según un comunicado de su oficina.
“Erdogan destacó la importancia de un alto el fuego entre Rusia y Ucrania, la implementación de la paz y la mejora de las condiciones humanitarias en la región”, cuenta su oficina en una lectura de la llamada.
Ambos presidentes acordaron que la próxima ronda de conversaciones del comité de paz entre Ucrania y Rusia se llevará a cabo en Estambul. Erdogan aseguró a Putin que Turquía seguirá participando en este proceso de negociaciones de paz.
Informa Reuters.
“Ucrania está preparada para negociar la adopción de un estatus neutral como parte de un acuerdo de paz con Rusia, pero tendría que ser garantizado por terceros y sometido a referéndum”, ha declarado el presidente ucraniano Volodímir Zelenski ante los medios rusos independientes en una entrevista difundida este domingo y que las autoridades rusas han pedido no difundir.
Zelenski también ha afirmado que Rusia debe retirar sus tropas del país antes de que se firme cualquier documento sobre la no adhesión de Ucrania a la OTAN y las garantías de seguridad que, a cambio, exige Kiev a varios países como Turquía y el Reino Unido. “Necesitamos un acuerdo con el presidente Putin. Los garantes no firmarán nada si hay tropas”, ha señalado a medios rusos, entre ellos el portal Meduza (ubicado en Letonia) y periodistas de la cadena de televisión prohibida Dozhd, del diario económico Kommersant y Mijaíl Zygar.
Zelenski ha hablado con ellos durante 90 minutos a través de videollamada, en una entrevista en la que el presidente ucraniano ha utilizado el ruso en todo momento, y ha dicho que la invasión de Rusia ha causado la destrucción de las ciudades de habla rusa en Ucrania y que el daño era mayor que el de las guerras rusas en Chechenia.
“Garantías de seguridad y neutralidad, estatus no nuclear de nuestro estado. Estamos listos para hacerlo. Este es el punto más importante”, ha declarado Zelenski, que también ha informado de que el uso del idioma ruso en territorio ucraniano forma parte de las conversaciones con Rusia, pero no así otras demandas rusas, como la desmilitarización.
“Esto está siendo trabajado profundamente, pero no quiero que sea otro documento como el Memorando de Budapest” de 1994, que concedió a Ucrania garantías de seguridad a cambio de la renuncia al arsenal nuclear heredado de la antigua Unión Soviética y que Zelenski ha dicho que quedó en papel mojado. “Nos interesa que sea un acuerdo serio”, ha remarcado.
Zelenski también se ha mostrado dispuesto a sentarse con Putin “en cualquier parte del mundo” para llegar a un acuerdo “con firmas, sellos e incluso sangre” rubricado en el documento.
Información de agencias.
El regulador de comunicaciones de Rusia ha pedido este domingo a los medios rusos que se abstengan de informar sobre una entrevista realizada con el presidente ucraniano Volodímir Zelenski y ha asegurado que se ha iniciado una investigación sobre los medios que entrevistaron al líder ucraniano.
En una breve declaración distribuida por el organismo de control en las redes sociales y publicada en su sitio web, afirma que bastantes de medios rusos habían realizado una entrevista con Zelenski
“Roskomnadzor advierte a los medios rusos sobre la necesidad de abstenerse de publicar esta entrevista”, comunicó, sin dar razones para su advertencia.
Información de Reuters.
Rusia prohíbe a los medios de comunicación utilizar los términos “invasión” y “ofensiva”
Miles de personas se manifestaron este domingo en diferentes ciudades portuguesas, como Lisboa y Oporto, para pedir el fin de la guerra en Ucrania, con pancartas en denuncia de la invasión rusa, conciertos, cordones humanos por la paz y banderas ucranianas.
Cuando se cumplen 32 días desde que comenzó la invasión rusa de Ucrania, en Lisboa se ha habilitado una pantalla gigante en la popular Plaza del Comercio para transmitir un mensaje grabado del presidente ucraniano, Volódimir Zelenski, que ha pedido más apoyo internacional y ha denunciado la operación llevada a cabo por Moscú.
Además, Lisboa y Cascais han sintonizado un concierto organizado desde Polonia en el que decenas de cantantes de todo el mundo están actuando en apoyo a los ucranianos, entre ellos el artista luso Salvador Sobral, que ganó la edición de 2017 de Eurovisión celebrada en Kiev.
El alcalde de la capital, Carlos Moedas, que se ha sumado a la embajadora ucraniana en Portugal, Inha Ohnivets, y a los cientos de personas que se han reunido en la plaza lisboeta, ha mostrado su apoyo a la comunidad ucraniana y ha asegurado que la guerra es “injustificable”. “Lisboa es una ciudad abierta, abierta a las culturas, abierta a la diversidad y abierta a Ucrania en este momento tan difícil”, ha dicho en declaraciones al canal luso CNN Portugal, y ha añadido que “el presidente (ruso, Vladímir) Putin consiguió unir a Europa como nunca había estado unida”.
Entre los presentes, había manifestantes con pancartas en las que se leía mensajes como “Parad la guerra” o “Parad la agresión rusa” y han mostrado una bandera ucraniana de varios metros de longitud.
El alcalde de Cascais, Carlos Carreiras, por su parte, abogó por que los refugiados ucranianos en Portugal, que ya superan los 20.000, sean acogidos “de la mejor forma”. “No son refugiados, son invitados”, aseguró Carreiras, que ha añadido que su voz, “juntándose a muchas otras voces”, puede lograr “que se haga luz en la cabeza de quien tiene el poder”.
En Oporto, otros centenares de personas se concentraron en un concierto por la paz organizado por el Consejo Portugués para la Paz y la Cooperación. En otras localidades, como Leiria, han organizado conciertos donde cantaron por el fin del conflicto.
El Gobierno luso ha agilizado la protección temporal de los refugiados ucranianos en el país y ha simplificado los procesos burocráticos para acceder a servicios de salud, fiscales y de empleo. Los ucranianos son ahora la segunda mayor comunidad residente en Portugal, que en total suman más de 45.000 ciudadanos, solo superados por los brasileños.
Informa EFE.
Las fuerzas ucranianas controlan la situación en la capital y la región de Kiev, pero creen que Rusia intentará romper de nuevo la resistencia después de reagruparse en territorio bielorruso, al tiempo que proseguirá su ofensiva en el sur y el este de Ucrania, especialmente en el Donbás.
“Se asignaron varias unidades al área de Chernóbil -en la región de Kiev- para su posterior reubicación a Bielorrusia, con el objetivo de restaurar la capacidad de combate”, ha señalado este domingo el Mando General de las Fuerzas Armadas de Ucrania. “Es posible que después de la implementación de estas medidas, el reagrupamiento y el fortalecimiento de las fuerzas, los ocupantes reanuden las acciones para bloquear Kiev desde la dirección suroeste”, ha añadido.
El Instituto para el Estudio de la Guerra (ISW, en inglés), con sede en EEUU, coincide en esta evaluación: “El Ejército ruso continúa concentrando reemplazos y refuerzos en Bielorrusia y Rusia al norte de Kiev, para luchar por posiciones en las afueras de la capital e intentar completar el cerco y la captura de Chernígov”.
En su último análisis, el ISW afirma que “las actividades rusas alrededor de Kiev no muestran cambios en la priorización del alto mando ruso de la lucha alrededor de la capital de Ucrania, que continúa ocupando la mayor concentración individual de fuerzas terrestres rusas en Ucrania”.
Informa EFE.
El alcalde de la ciudad de Chernígov, en el norte de Ucrania, confirmó ayer que 44 personas habían resultado gravemente heridas, incluidos tres niños, y no podían ser evacuadas a áreas más seguras para recibir tratamiento ya que las fuerzas rusas habían aislado la ciudad.
La ciudad, cerca de la frontera con Bielorrusia, ha sido efectivamente rodeada, según las autoridades locales, que advirtieron que se había vuelto imposible evacuar a los civiles o disponer de ayuda humanitaria porque un puente que unía la ciudad con la capital de Ucrania en el sur había sido destruido por los bombardeos.
El alcalde de Chernígov, Vladyslav Atroshenko, declaró en la televisión nacional que la situación era particularmente crítica para las 44 personas heridas que necesitaban tratamiento de emergencia: “No pueden sobrevivir aquí debido a la gravedad de sus heridas, necesitan una evacuación urgente”.
También aseguró que todavía había hasta 130.000 personas sin calefacción, electricidad o suministro de agua en Chernígov, bajo fuertes bombardeos por parte de las fuerzas rusas. La ciudad tenía una población antes de la guerra de alrededor de 290.000, comentó.
El viernes, el Ministerio de Defensa de Rusia dijo que las fuerzas rusas habían “bloqueado” ciudades ucranianas, incluida Chernígov, para atar al ejército ucraniano, mientras que se concentraban en tomar el control en la región oriental de Donbass.
Información de Reuters.
Altos cargos de EEUU han insistido este domingo en que Washington no busca un cambio de régimen en Rusia y han intentado matizar las declaraciones del presidente estadounidense, Joe Biden, quien el sábado proclamó que su homólogo ruso, Vladímir Putin, no debe seguir en el poder.
Fueron apenas unas palabras al final de un discurso de 27 minutos en Polonia. “Por el amor de Dios, este hombre no puede permanecer en el poder”, expresó Biden. La frase no estaba en el texto que le habían preparado sus asesores y, enseguida, la Casa Blanca se apresuró a dejar claro que Biden no había anunciado un cambio en la política exterior de Estados Unidos, que ha hecho todo lo posible para evitar ser acusado de injerencia en los asuntos internos rusos.
En concreto, un funcionario de la Casa Blanca dijo a los periodistas que Biden no quería referirse al “poder de Putin en Rusia”, sino solo subrayar “que no se puede permitir” que el líder ruso “ejerza su poder sobre sus vecinos en la región”.
Los intentos para rebajar la fuerza de las palabras de Biden han continuado este domingo. El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, de visita en Israel, ha afirmado que su gobierno “no tiene como estrategia un cambio de régimen en Rusia” y repitió la línea oficial de la Casa Blanca: Biden no se refería a sacar del “poder” a Putin, sino a que no debe ser “empoderado” para librar una guerra en Ucrania.
Dentro de EEUU, la oposición republicana ha aprovechado este domingo para criticar a Biden, quien ha llegado a describirse a sí mismo como una “máquina de meteduras de pata” por decir directamente lo que piensa.
Información de EFE.
Ciudadanos ucranianos y simpatizantes se han manifestado este domingo en Roma para exigir paz y mostrar su rechazo a la guerra que asola Ucrania, después de que las tropas rusas entraran en el territorio ucraniano el pasado 24 de febrero.
El primer ministro húngaro, el ultranacionalista Viktor Orbán, ha respondido a las recientes críticas expresadas en su contra por el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, diciendo qué él es abogado y no solo actor como el líder ucraniano.
“Yo soy abogado y trabajo con los conocimientos que he acumulado en el mundo de las leyes. Alguien que es actor, pues trabaja con los conocimientos que ha acumulado como actor”, ha dicho Orbán en declaraciones a la radio pública Kossuth.
Sin embargo, poco después de la entrevista, el portal opositor de noticias telex.hu ha destacado que antes de ser actor, Zelenski se graduó en Derecho en la Universidad de Economía de Kiev, mientras que Orbán ha sido toda su vida político y parlamentario. “Esto hace que en realidad (Orbán) no haya pasado ni un solo minuto en el mundo de las leyes”, añade el portal opositor.
En su intervención telemática a los líderes europeos esta semana, Zelenski se dirigió explícitamente a Orbán y le pidió que se decida “de qué lado” está en la agresión rusa. Hungría, país miembro de la OTAN desde 2004, intenta presentarse como neutral en esta crisis y no permite a través de su territorio el envío de armamento occidental a Ucrania.
Orbán, que busca su cuarto mandato en las elecciones generales del domingo próximo, ha mantenido hasta ahora una estrecha relación con el presidente ruso, Vladímir Putin.
Los comités negociadores de Ucrania y Rusia se reencontrarán en Turquía del 28 a 30 de marzo para una nueva ronda de conversaciones, según el jefe de la delegación ucraniana, David Arahamiya.
“Hoy, en la ronda (de negociaciones) por videoconferencia, las dos delegaciones decidieron celebrar la próxima ronda en persona en Turquía del 28 al 30 de marzo”, informó en su cuenta de Facebook el líder de la fracción parlamentaria oficialista El Servidor del Pueblo. El jefe de la delegación rusa, Vladímir Medinski, confirmó la cita, aunque sin mencionar Turquía, en su canal oficial de Telegram.
“Hoy tuvo lugar otra ronda de negociaciones con Ucrania vía videoconferencia. Como resultado, se tomó la decisión de reunirse cada a cara” escribió, aunque él sostuvo que el encuentro tendría lugar del 29 al 30 de marzo.
Por el momento, Ucrania y Rusia se han reunido de forma presencial en tres ocasiones el 28 de febrero, el 3 de marzo y el 7 de marzo en territorio bielorruso. Desde el 10 de marzo, cuando tuvo lugar el encuentro en Turquía de los ministros de Exteriores de Rusia y Ucrania, Serguéi Lavrov y Dmitro Kuleba, las negociaciones se producen prácticamente a diario en formato de videoconferencia a nivel de las dos delegaciones y de grupos de trabajo.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, que está comprometido en el mantenimiento de canales diplomáticos en el conflicto e intenta mediar entre las partes, afirmó el viernes que en las negociaciones entre Kiev y Moscú que “se puede decir que hay acuerdos sobre algunos temas”, en concreto en cuatro de seis puntos.
Con información de agencias.