La Policía rusa ha registrado este miércoles el domicilio de Marina Ovsyánnikova, la periodista que en marzo pasado interrumpió el principal noticiero de la televisión pública rusa con unas proclamas antibélicas, según el portal OVD-Info.
Las diligencias policiales, según el abogado de Ovsyánnikova, Dmitri Zajvatov, se llevan a cabo en el marco de un caso penal que las autoridades abrieron contra su clienta después de multarla en tres ocasiones. El caso fue incoado por la difusión de información “falsa” sobre la actuación del Ejército ruso, ha precisado el letrado.
La mujer, de 44 años, y redactora del Canal 1, interrumpió el 14 de marzo la emisión en directo del telediario nocturno (Vremia) realizando proclamas y blandiendo un cartel contra la ofensiva militar rusa en Ucrania.
“No a la guerra. Pongan fin a la guerra. No crean en la propaganda. Aquí les están mintiendo. Rusos contra la guerra”, decía el cartel.
En aquella ocasión, Ovsyánnikova fue multada y perdió su trabajo. Posteriormente, la periodista recibió otras dos multas.
A través de EFE.
La ONU espera próximamente un fuerte aumento del tránsito de barcos con exportaciones de cereal ucraniano, una vez que se aclaren los procedimientos pactados entre Kiev y Moscú para permitir la circulación por el mar Negro y tras la salida de buques que llevaban meses atrapados en los puertos.
Frederick Kenney, coordinador de Naciones Unidas en el Centro de Coordinación Conjunta (JCC), lo ha señalado así este miércoles en una conferencia de prensa por vídeo en la que ha indicado que espera ver pronto “un gran repunte” de las solicitudes para transitar y que con ello se dirijan importantes cantidades de trigo y otros productos a países muy necesitados.
“Hemos visto un tremendo interés por parte de los propietarios de barcos”, ha destacado Kenney, y ha explicado que hay embarcaciones vacías que se encuentran en aguas turcas a la espera de cerrar los contratos para entrar a puertos ucranianos a cargar el cereal.
A través de EFE.
Un tribunal de Moscú ha multado este miércoles al periódico independiente ruso Nóvaya Gazeta con 350.000 rublos (5.790 dólares) por difundir “noticias falsas” y “abusar de la libertad de prensa”.
El rotativo ruso fue sancionado por violar la ley sobre “abuso de la libertad de prensa”, según informó la corte a la agencia de noticias TASS.
La ley pena “la difusión de informaciones falsas de importancia a nivel social presentadas como noticias fidedignas que generen una amenaza a la vida o la salud de la ciudadanía, o generen amenazas al orden público”.
El periódico, que lanzó su primera tirada de mil ejemplares el 1 de abril de 1993, se vio obligado a fines de marzo a suspender su publicación en su versión en papel y digital “hasta el fin de la operación especial en territorio de Ucrania” iniciada el 24 de febrero.
“Nóvaya Gazeta” había dejado de informar sobre la campaña militar rusa tras la aprobación de una ley que castiga con graves multas y hasta 15 años de cárcel la difusión de “información falsa” sobre el Ejército ruso.
A través de EFE.
Rusia ha solicitado para este jueves una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU con el fin de abordar la situación en la central ucraniana de Zaporiyia, controlada sus tropas y que según Moscú está siendo atacada por Kiev.
Así lo ha señalado en Twitter el embajador adjunto ruso ante Naciones Unidas, Dmitri Polyanskiy, que adelantó que se espera que en la cita comparezca por videoconferencia el director general del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), el argentino Rafael Grossi.
Por ahora, la cita no ha sido añadida oficialmente a la agenda de encuentros del Consejo de Seguridad, que este mes está presidido por China.
El pasado sábado, Grossi se mostró muy preocupado por el bombardeo la mayor planta atómica de Europa y alertó de que se está “jugando con fuego” y existe el riesgo de un “desastre nuclear”.
En medio de una fuerte tensión en torno a Zaporiyia, Moscú y Kiev se han acusado mutuamente de poner en riesgo la seguridad de la instalación, que el Ejército ruso tomó en los primeros compases de su invasión.
A través de EFE.
El ministro de Defensa ucraniano, Oleksei Reznikov, ha negado este miércoles que su país esté detrás de las explosiones del martes en una base aérea rusa en Crimea y ha culpado del incidente a un descuido de los soldados rusos.
“Las fuerzas ucranianas no han estado involucradas”, ha dicho Reznikov en rueda de prensa en Copenhague, donde este jueves participará en una conferencia de donantes de ayuda militar a Ucrania.
Reznikov ha atribuido el incidente a un descuido de los soldados rusos y ha insinuado que provocaron una explosión al arrojar colillas. “Es un lugar muy peligroso, no se puede fumar. No hay que fumar en lugares peligrosos”, ha indicado en una comparecencia conjunta con sus homólogos británico, Ben Wallace, y danés, Morten Bødskov.
El mando del Ejército ucraniano había asegurado este miércoles que Rusia perdió nueve aeronaves y había hablado de “pequeña victoria”, en referencia a la península anexionada por Rusia hace ocho años.
El Ministerio de Defensa ruso, por su parte, había dicho que el incidente, en el que murió una persona, fue resultado de una detonación accidental y restó importancia al asunto.
Informa EFE.
El ministro de Asuntos Exteriores de Ucrania, Dmytro Kuleba, ha pedido este miércoles a los países de la Unión Europea (UE) y del club de naciones industrializadas del G7 que cesen la expedición de visados a ciudadanos rusos.
“Pido a todos los Estados de la UE y del G7 que dejen de expedir visados a rusos”, ha escrito Kuleba en su perfil de Twitter, al tiempo que ha considerado que “la mayoría de los rusos apoyan la guerra en Ucrania”. “Se les debe privar del derecho a cruzar fronteras internacionales hasta que aprendan a respetarlas”, ha añadido en la red social.
Las declaraciones de Kuleba se producen después de que los Gobiernos de Estonia y de Finlandia hayan instado a los Estados de la UE a poner fin a la expedición de visados turísticos que permitan a los ciudadanos rusos viajar al espacio Schengen.
“No está bien que mientras Rusia libra una brutal guerra de agresión en Europa, los rusos puedan llevar una vida normal, viajar por Europa, ser turistas”, afirmó la primera ministra finlandesa, Sanna Marin, esta semana.
Informa EFE.
Los ministros de Exteriores del club de naciones industrializadas del G7 exigieron este miércoles a Rusia que retire sus fuerzas de la central nuclear de Zaporiyia y de otras plantas en Ucrania y las devuelva al control de las autoridades en Kiev para garantizar un funcionamiento seguro.
El G7 -integrado por Estados Unidos, el Reino Unido, Canadá, Japón, Francia, Italia y Alemania, que en estos momentos ejerce de anfitriona- hace este llamamiento en pleno recrudecimiento de las tensiones en torno a la mayor central nuclear de Europa.
“Es la permanencia del dominio ruso sobre la central nuclear la que pone en riesgo la región,” han afirmado los ministros en un comunicado en el que se declararon “profundamente preocupados” por la “seria amenaza” que emana de la ocupación rusa de las instalaciones. Ésta “eleva significativamente el riesgo de un accidente o de un incidente nuclear y pone en peligro a la población de Ucrania y de los estados vecinos y a la comunidad internacional”, han señalado.
A través de EFE.
El buque “Razoni”, el primer barco que salió del puerto ucraniano de Odesa y que transportaba un cargamento de maíz con destino al Líbano, finalmente ha atracado en el puerto de Mersin en Turquía.
El embajador de Ucrania en el Líbano, Ihor Ostash, ha confirmado la llegada del buque a territorio turco en una sesión informativa en el Media Center Ucrania de Kiev, según la agencia local Ukrinform.
“El barco 'Razoni', que fue el primero en salir del puerto de Odesa y se dirigía al puerto de Trípoli (en el norte de Beirut) en el Líbano, ha atracado en el puerto de Mersin, en Turquía, lo que significa que todos los problemas que rodean a este buque de carga seca han desaparecido”, ha indicado.
Ostash ha agregado que el sábado, cuando se suponía que el barco atracaría en el puerto libanés de Trípoli, había muchos periodistas esperando su llegada y él personalmente sintió “la importancia de Ucrania para el mundo” en estos momentos.
“Sentí que Ucrania es muy importante para el mundo en la lucha contra una crisis alimentaria. El país realmente está salvando al mundo”, ha subrayado.
El “Razoni” no pudo desembarcar el pasado 8 de agosto en el Líbano después de que el comerciante libanés que estaba previsto que adquiriese el cereal rechazara el cargamento.
Con información de EFE.
Rusia reanudará este miércoles el transporte de petróleo a través del oleoducto Druzhba, que fue interrumpido el 4 de agosto por la imposibilidad de abonar el coste del tránsito por Ucrania, ha informado la operadora rusa de oleoductos Transneft.
“Llevamos a cabo labores para iniciar el trabajo. La parte bielorrusa también ha confirmado la posibilidad de reiniciar la labor (del oleoducto). Planeamos comenzar el bombeo por el tramo Mijalki-Brody a las 16.00 hora de Moscú (13.00 GMT)”, ha dicho a la agencia RIA Nóvosti Ígor Demin, asesor de la presidencia de Transneft.
Demin ha explicado que una vez llegue la cantidad suficiente de crudo a Brody (en el oeste de Ucrania), se procederá al bombeo en dirección a Budkovtsi, de manera que primero el petróleo llegará a Eslovaquia y luego, a Hungría.
La petrolera húngara MOL aseguró este miércoles que ha pagado a Kiev una suma por el tránsito de crudo a través del territorio ucraniano con el fin de que se reinicie el bombeo interrumpido. Por el momento, no se sabe el coste que ha asumido la empresa húngara tras varios días de negociaciones, o la cantidad del crudo que puede atravesar Ucrania a cambio del dinero abonado.
A través de EFE.
El Gobierno de Ucrania ha informado al Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) de que los ataques del pasado viernes sobre la central nuclear de Zaporiyia causaron algunos daños cerca del almacén de combustible gastado en seco, si bien las mediciones de radiación han seguido mostrando niveles normales.
En un comunicado publicado el martes, el Director General de la OIEA, Rafael Mariano Grossi, explica que el incidente se produjo el sábado después de que en la víspera un bombardeo dañara el sistema de suministro eléctrico externo de la central, hiriendo también a un guardia de seguridad ucraniano de la planta, la mayor de toda Europa.
Según informó Ucrania a la OIEA, la explosión generó además daños en algunas paredes, ventanas y techos cerca de ese almacén de combustible gastado, además de cables de comunicación que forman parte del sistema de control de radiación.
Kiev aseguró sin embargo que “no hubo daños visibles en los contenedores con combustible nuclear gastado ni en el perímetro de protección de la instalación”.
La petrolera húngara MOL ha asegurado este miércoles que ha pagado a Kiev una suma por el tránsito de crudo a través del territorio ucraniano del oleoducto ruso Druzhba, con el fin de que se reinicie el bombeo interrumpido el pasado día 4.
“Con el pago de la tasa (de tránsito del crudo), MOL ha ofrecido una rápida solución al problema: según los ucranianos, en pocos días se reanudará el tránsito de petróleo”, ha señalado la empresa, según la agencia MTI.
Por el momento, no se sabe cuándo se reiniciará el transporte de petróleo ruso a través del Druzhba, ni tampoco el coste que ha asumido la empresa húngara tras varios días de negociaciones, o la cantidad del crudo que puede atravesar Ucrania a cambio del dinero abonado.
Según informó este martes la operadora rusa de oleoductos Transneft, la empresa ucraniana UkrTransNafta detuvo el 4 de agosto el bombeo de crudo ruso por el ramal sur de Druzhba, que abastece a Hungría, Eslovaquia y la República Checa.
Por otro lado, el Gobierno húngaro controla desde este miércoles el comercio con la leña mediante nuevas regulaciones que incluyen el derecho preferente de compra para el Estado y posibles vetos a la exportación de ese producto que Budapest considera clave para el abastecimiento energético del país. Las medidas han sido adoptadas pocas horas después de que quedara interrumpida la llegada del petróleo ruso.
A través de EFE.