El FBI y las autoridades de Minnesota han abierto una investigación después de que un policía matara a un afroamericano al asfixiarlo con la rodilla tras ser detenido. El suceso ocurrió en la noche del lunes cuando un establecimiento de la ciudad alertó a la policía de que el individuo estaba utilizando un billete de 20 dólares falso para pagar.
Cuando la patrulla llegó al local, el hombre, identificado como George Floyd, estaba en su coche y los agentes justificaron su detención porque se resistió a salir del vehículo y parecía estar drogado y borracho. En un vídeo difundido en redes sociales, se puede ver cómo Floyd está esposado en el suelo, boca abajo, y con la rodilla de uno de los policías sobre su cuello durante varios minutos. A pesar de que el individuo se quejaba de no poder respirar: “Me duele el cuello. Todo me duele... agua o algo, por favor. No puedo respirar, agente, no puedo respirar”. El agente continúa en la misma posición hasta que Floyd parece perder el conocimiento ante la mirada impasible de otros agentes y los gritos de varios viandantes que alertan de que van a ahogarle y que está sangrando por la nariz.
“Durante cinco minutos vemos cómo un agente blanco apretó su rodilla en el cuello de un hombre negro. Cinco minutos”, afirmó este martes conmovido el alcalde de Minneapolis, Jacob Frey, en una conferencia de prensa junto al jefe de Policía, Medaria Arradondo, quien anunció que los cuatro agentes implicados han sido despedidos. “Cuando uno escucha que alguien pide socorro se supone que hay que socorrerlo”, añadió el alcalde. “Este agente falló en el sentido humano más básico. Lo que ocurrió anoche fue, simplemente, horrible”. “Ser afroamericano no debería ser una condena”, expresó Frey.
Según la versión policial, los agentes notaron que presentaba “dificultades médicas”, por lo que llamaron a una ambulancia, que lo trasladó a un centro de salud donde murió poco después.
“Estás disfrutándolo”, se oye decir a uno de los testigos en el vídeo. “A estas alturas ya podrías haberlo metido en el coche. No está resistiéndose, nada. Estás disfrutándolo. Tu lenguaje corporal lo dice... Sabes bien que es todo una farsa”. Otro transeúnte pide a la policía que le tome el pulso. “Ahora ya no responde, no se mueve”, asegura.
La familia de Floyd ha contratado a un reputado abogado, defensor de los derechos civiles, quien en un comunicado recogido por The Guardian asegura que su muerte es el resultado del “uso abusivo, excesivo e inhumano de la fuerza”. “Buscaremos justicia para la familia de George Floyd, ya que exigimos respuestas del departamento de policía de Minnesota”, ha asegurado Benjamin Crump.
Las reacciones no se han hecho esperar. La congresista demócrata que representa el distrito de Minnesota donde ocurrió el incidente, Ilhan Omar, ha dicho en un tuit que la brutalidad policial “debe terminar” y ha pedido en una carta, firmada por otros representantes –entre los que se encuentra la senadora por ese estado y excandidata demócrata en la carrera por la presidencia de EEUU, Amy Klobuchar– para que se investigue el “injusto asesinato” a todos los niveles.
El martes por la noche miles de personas salieron a la calle para protestar por la muerte de George Floyd. La marcha empezó en el lugar de la muerte de Floyd y terminó frente a una comisaría cercana al grito de “¡no puedo respirar!”, donde la Policía antidisturbios lanzó gases y pelotas de goma a los manifestantes tras algunos disturbios y enfrentamientos con los agentes.