No es raro que de vez en cuando saquemos a relucir el tiempo que parece sobrarle a la gente, sobre todo a aquellos que lo invierten en temas tan peculiares como por ejemplo buscar bugs ocultos en juegos de hace 29 años.
Hoy el caso que hemos encontrado es tanto o más peculiar, ya que hablamos de toda una hazaña épica sólo al alcance de los más jugadores más entregados. Hablamos de Joe O’Connell, un chico que ha dedicado cinco años de su vida disputando una y otra vez el mismo combate hasta conseguir un raro espécimen de Pokémon, un Mewtwo brillante que aparece de forma completamente aleatoria en la cueva de Cerulean, en el juego Pokémon Verde Hoja.
Según O’Connell, ha llegado a reiniciar el juego más de 100.000 veces repitiendo la misma estrategia cada 18 segundos hasta que por fin ha conseguido a su deseado Pokémon sin usar ningún truco o trampa que valga.
En definitiva, que no sabemos si con todo esto habrá tenido tiempo de aprobar las mates, conocer a una chica o dar de comer a su gatito. Pero al menos el dichoso Pokémon ya es suyo, y nadie podrá arrebatárselo... salvo que por algún tipo de castigo divino/paterno su consola acabe en la papelera.