Facebook y Zuckerberg pueden despertarte simpatía o no. En general no existen medias tintas, o los amas o los odias, pero al parecer puede haber un estado intermedio que debe ser en el que se encuentra Markus Persson, el creador del videojuego de mundo abierto Minecraft.
Debe ser que “Notch”, como es conocido, no es muy amigo de la red social más grande del mundo ya que tras enterarse de la decisión que Facebook tomó para comprar la patente de OculusOculus Rift se “enfadó” hasta tal punto que llegó a negarse a una posible adaptación de Minecraft para el dispositivo de realidad virtual. Simplemente alegó que “dudaba” sobre la viabilidad del proyecto después de que Facebook metiera sus narices en él. Por supuesto las declaraciones no quedaron exentas de polémica.
Parece ser que tras el período de adaptación y asimilación de la frustración de Markus Persson las aguas vuelven a su cauce y con ella, la rabieta del Sr. Persson. Al menos así lo hace saber en su cuenta oficial de Twitter en el que ahora parece ser que centra toda su irascibilidad en el “agujero de su calcetín favorito”.
No deja de ser sorprendente que la volubilidad de las decisiones y estados de ánimo tengan efectos tan diferentes sobre la gente que te rodea, dependiendo de cuán importante sea tu nombre (o cuán cantidad de dinero genere, más bien). Tratándose de un “gigante” como es Notch no es de extrañar que a su alrededor surjan hombres que le perdonan todas las rabietas. Parece ser que el jefe técnico de Oculus Rift, John Carmack se une al grupo de palmeros y le ofrece pasar por alto su efímero enfado para ponerse manos a la obra con el proyecto: “Di las palabras, envía la fuente y haré que funcione bien donde ya sabes”, afirma literalmente en su cuenta de Twitter.
No sabemos hasta qué punto los seguidores de Minecraft están dispuestos a soportar estos vaivenes pero por lo que vemos, los peces gordos de la industria, mientras haya dinero de por medio, son capaces de perdonar hasta que les abofeteen con un arenque.