¿Qué es lo que más pesa a la hora de garantizar el éxito comercial de un videojuego? ¿Quizás la nota dada por los diferentes medios en los correspondientes análisis? Pues según Double Fine, estudio independiente detrás de joyas como Broken Age, a los jugadores ya poco les importan las notas, una afirmación que parece lógica si tenemos en cuenta ejemplos como lo mucho que vendió Watch Dogs en relación con su nota media en Metacritic, donde ni siquiera pasó del 80 sobre 100 cuando se esperaba que fuera un juego de sobresaliente redondo y lirondo.
Sobre esta misma plataforma, dedicada a concentrar en una sola la nota dada por los principales medios tanto en videojuegos como en películas, discos o libros, ha hablado Justin Bailey, uno de los máximos representantes del estudio, asegurando que ha perdido peso y que hoy por hoy “no hay necesidad de obsesionarse con Metacritic” porque está “básicamente obsoleta”.
Bailey asegura que esta plataforma no tiene peso real a la hora de decidir las ventas de un videojuego al igual que ocurre con las grandes ferias y eventos. De hecho recalca que ni siquiera los propios medios especializados tienen el peso que creen tener a la hora de que un jugador se decida a comprar o no un videojuego, y que son más los desarrolladores y los propios medios los que se obsesionan con los análisis redactados y la correspondiente puntuación.
Por otro lado señala que lo que realmente sí que motiva las ventas son las promociones del tipo ‘juega gratis todo el fin de semana’ tan de moda en Steam, dado que permiten que miles de usuarios que no tenían pensado adquirir determinado juego lo prueben y se enganchen. También realza la importancia de canales alternativos como Youtube y Twitch con los famosos gameplays subidos por ciertos usuarios y las retransmisiones de partidas en directo.