Microsoft no es precisamente uno de los mayores gigantes del mundo de la informática gracias a los deseos concedidos por un genio surgido de una lámpara o a aquel trébol de cuatro hojas que se encontró Bill Gates durante un plácido paseo de domingo por el campo. El éxito de esta multinacional se basa, por encima de todo, en Windows, de forma que empresa matriz y el popular Sistema Operativo forman una simbiosis indivisible. Como en los matrimonios tradicionales, están unidos tanto en lo bueno como en lo malo.
Así pues suele decirse que en lo referente a las diferentes entregas de Windows, a una buena siempre le sucede una mala y viceversa. Tras Windows XP vino un fuertemente criticado Vista, al que le siguió Windows 7 y después el actual Windows 8, un S.O. que no ha sabido calar en determinados sectores que lo ven capado para según qué cosas.
Ahora le toca el turno a Windows 10, la nueva entrega que ha sido anunciada por sorpresa por la compañía de Redmond como un sistema que busca adaptarse a cualquier tipo de dispositivo ya sea móvil como tabletas y smartphones o bien un PC tradicional. Destaca una interfaz a mitad de camino entre Windows 7 y 8, ideada para, según la propia compañía, facilitar la transición de los millones de usuarios que aún trabajan con la entrega de 2009. Y sí, el ‘9’ parecen habérselo saltado a la torera, algo que no terminamos de entender.
Como ya hemos comentado su punto fuerte radicará en ofrecer un único entorno para todas las plataformas, ya sean ordenadores de sobremesa, móviles con pantallas de 4 pulgadas, servidores de centros de datos de empresas o tabletas. Windows 10 se adaptará a cada entorno acabando con la dualidad de aplicaciones al contar con un mercado común de Apps.
Con una estética renovada que busca la simplicidad y la facilidad de acceso, sus responsables han prometido que tampoco faltarán las opciones de personalización para que cada cual pueda ampliar o reducir menús, fuentes e iconos, además de contar con un sistema que nos sugerirá abrir una u otra ventana en los huecos del escritorio que tengamos libres para favorecer la multitarea. Por supuesto Windows 10 será 100% compatible con las consolas Xbox.
Por el momento no se ha dicho nada de su fecha de lanzamiento y precio de venta, aunque se espera que llegue a las tiendas a mediados del año que viene.