No todo en los chicos de Rockstar iba a ser pegar tiros y golpear prostitutas por mucho que sus juegos, y en especial la saga Grand Theft Auto, puedan transmitir dicha sensación a ciertos sectores de la sociedad, si no que hablamos de profesionales ilustrados, apasionados del arte, de la arquitectura e inclusive un tanto devotos.
Esa es otra lectura que se podría extraer del hecho de que Leslie Benzies, presidente de Rockstar North y uno de los máximos responsables de la saga GTA desde su primera entrega, esté por la labor de gastarse más de 500.000 libras (unos 625.000 euros) en la compra de la iglesia de San Esteban, situada en el mismo centro de la ciudad escocesa de Edimburgo.
Dicha iglesia se utiliza hoy en día para acoger otras cosas que poco o nada tienen que ver con el culto, como festivales de arte y entretenimiento, y la compra por parte de Benzies parece motivada por la salida a concurso de dicho edificio y la intención por parte de diversos inversores de convertirlo en un centro comercial.
Si de esta forma Benzies ha conseguido que se mantenga como un centro de arte y ocio, por nosotros como si se compra la Sagrada Familia, el Vaticano y la Mezquita de Córdoba... que centros comerciales ya hay muchos.