The Witcher III: Wild Hunt es uno de los juegos más esperados de 2015. Tras su retraso a mayo, los fans no paran de morderse las uñas mientras esperan el momento de poner las manos encima a la nueva aventura de Geralt de Rivia, que promete convertirse en uno de los mejores RPGs vistos hasta la fecha, no sólo por su trama y ambientación, sino por su apartado gráfico y técnico.
Recientemente se ha confirmado que el juego correrá a 1080p/30fps en PlayStation 4 y a 900p/30fps en Xbox One, una decisión que parece haber decepcionado a algunos usuarios que esperaban un videojuego con un aspecto cinematográfico. CD Projekt RED aspiraba a una tasa de 60fps, pero tuvieron que cambiar de objetivo durante el desarrollo del juego, decisión que el productor de arte senior del estudio, MichaÅ KrzemiÅski, ha decidido explicar a Gamingbolt.
“Cuando tienes la visión de crear un RPG que deje una gran impresión a largo plazo, no piensas en términos de resolución o frame rate” ha comentado. “Piensas en aventura, piensas en un mundo vivo, y las cosas que podrás hacer en ese mundo. Los aspectos técnicos son secundarios, lo que por supuesto no significa que no queramos gráficos asombrosos”.
Las prioridades del equipo de dar importancia al contenido antes que al aspecto demuestran ser muy acertadas, sobre todo después de las duras críticas que han recibido juegos como Ryse: Son of Rome para Xbox One o The Order: 1886 para PS4, con un apartado gráfico que quita el aliento pero con varias limitaciones en la metodología de juego.
The Witcher III: Wild Hunt saldrá a la venta el 19 de mayo, y estará disponible en PC y las ya mencionadas consolas. Durante las semanas siguientes al lanzamiento, CD Projekt RED irá distribuyendo contenido gratuito para ampliar la experiencia de los jugadores.