El equipo de CD Projekt RED ha sufrido hace poco un duro golpe. Desde hace meses, cientos (miles, millones por las últimas informaciones) de jugadores llevan esperando el lanzamiento de su esperadísimo RPG, The Witcher 3: Wild Hunt, la tercera aventura de Geralt de Rivia en consolas y PC, que saldrá a la venta de forma oficial el 19 de mayo. Decimos de forma oficial porque el duro golpe del que hablamos es nada más y nada menos que la salida a la venta del juego antes de tiempo.
En concreto, ha sido en los Emiratos Árabes donde varios jugadores se han encontrado con Wild Hunt en las tiendas. Una gran noticia para ellos, una malísima para los desarrolladores y los fans del resto del mundo. ¿Por qué? Porque inmediatamente la red se ha poblado de spoilers, imágenes, vídeos gameplay y toda clase de detalles sobre el juego. Una información que no beneficia en absoluto a CD Projekt RED y que muchos jugadores desean evitar a toda costa para que no les destripe la experiencia.
Por supuesto, el caso de The Witcher 3 no es el único, ya que últimamente parece haberse puesto de moda lo de saltarse las fechas de lanzamiento fijadas por las editoras. En España, por ejemplo, tenemos numerosos casos. Dos de ellos muy sonados, y protagonizados por la misma compañía.
Nos referimos a “El Corte Inglés”, que ni corto ni perezoso empezó a vender copias de Super Smash Bros para Nintendo 3DS días antes de su lanzamiento, una decisión que no gustó en absoluto a Nintendo y que muchos jugadores recriminaron. Y no fue la única vez. The Evil Within, el juego de terror desarrollado por Shinji Mikami y Bethesda, llegó a las estanterías de la famosa cadena un día antes de lo esperado.
Otra situación parecida la vivimos con Pokémon X y Pokémon Y, las primeras entregas de la icónica franquicia para Nintendo 3DS, que revolucionó gracias a su nuevo apartado gráfico y jugabilidad. Aunque la fecha de lanzamiento estaba prevista para el 12 de octubre, algunos comercios se adelantaron y la pusieron a la venta el día 11. Este caso tiene justificación, ya que el día 12 era festivo, pero a la vez no, porque Nintendo Ibérica no dio permiso a los comercios para sacar el juego a la venta antes de tiempo. No fuimos el único país en hacerlo (en Brasil, por ejemplo, vendieron los títulos de manera anticipada, siendo sancionados por ello) pero recibimos nuestro castigo: Pokémon Rubí Omega y Pokémon Zafiro Alfa, las últimas entregas de la saga, salieron a la venta en Europa más tarde que en el resto del mundo.
Otro caso reciente es el del comentadísimo The Order: 1886, el juego de Ready at Dawn que nos traslada a un Londres victoriano alternativo, donde debemos luchar contra hombres lobo y rebeldes armados hasta los dientes. Una semana antes del lanzamiento del juego, usuarios que se habían hecho con él antes de tiempo lo publicaron íntegramente a través de Youtube, desatando la polémica.
Muchos se preguntarán a qué se deben estas filtraciones y salidas a la venta prematuras, pero la respuesta es sencilla. Estos casos siempre han estado ahí, pero con el auge de las nuevas tecnologías, redes sociales como Twitter y Facebook o plataformas de retransmisión de vídeos, como Youtube y Twitch, ahora nos enteramos de que han ocurrido. Eso por no hablar del impacto, que se ha multiplicado enormemente.
Ahora, si un juego sale a la venta antes de tiempo nos enteramos al instante, y eso es negativo para muchas de las partes implicadas. En primer lugar, para los fans que están deseando probar los títulos y que por desgracia se topan con spoilers no deseados que, en mayor o menor medida, estropean la experiencia de juego. Muchos pensarán “Si no quieren ver spoilers, que no busquen información”, pero es más fácil decirlo que hacerlo.
Los segundos afectados son los comercios encargados de vender los juegos, especialmente si son pequeñas tiendas no pertenecientes a compañías gigantescas o centros comerciales de la talla de Fnac o El Corte Inglés. Cuando un juego sale a la venta antes de tiempo en un lugar, decenas (si no cientos) de fans cancelan las reservan hechas en otros sitios y acuden a comprarlo al instante. Estas pérdidas, mínimas para los gigantes de la industria, sí que suponen un duro golpe para los pequeños comerciantes, que ven como gran parte de los ingresos previstos con la llegada de un título importante se desvanecen.
Por último, estas filtraciones también afectan a los estudios desarrolladores. Ya le ocurrió a The Order; 1886, y si lo dejáramos en manos de algunos usuarios resentidos, también le ocurriría a The Witcher 3: Wild Hunt. Con la publicación de vídeos y gameplays de las versiones finales de los juegos, siempre aparecerán jugadores que saquen numerosos fallos.
Cuando The Order: 1886 fue subido íntegramente a Youtube, cientos de usuarios se quejaron por la falta de acción, la jugabilidad que no respondía a lo presentado por los creadores y muchos otros aspectos. Esto afectó irremediablemente al resultado final del juego, que recibió toda clase de críticas antes de su lanzamiento oficial. Ante estas quejas, muchos usuarios no se atrevieron a comprarlo, y otros tantos iban predispuestos a que no les gustara. Porque, queramos o no, la opinión de los demás también afecta a lo que pensemos de un juego.
Con The Witcher 3: Wild Hunt, está sucediendo algo parecido, aunque no de forma tan severa. Muchos usuarios están comparando la versión final del juego con los primeros trailers, remarcando la diferencia de calidad gráfica entre uno y otro, y acusándolo de sufrir un downgrade excesivo. Por supuesto, no podemos saber si esto es cierto o no, si las imágenes mostradas son correctas y no han sido modificadas, si las versiones puestas a la venta cuentan con los parches y actualizaciones requeridas para que el juego funcione con fluidez, etc. Pero los rumores están ahí, y nunca se sabe cómo pueden afectar a las ventas de un juego.
Seamos sinceros, todos estamos deseando hacernos con nuestros juegos favoritos antes de tiempo. Sin embargo, las fechas fijadas por las editoras tienen un por qué, y si nos empeñamos en no respetarlas y en destripar contenido de juegos que aún no están a la venta de forma oficial afectamos tanto a jugadores como vendedores.
¿Cambiará esto en algún momento? Es difícil saberlo. Lo único que está claro es que mientras distribuidores y usuarios no actúen con responsabilidad, seguiremos viendo cómo títulos salen a la venta antes de tiempo, cómo cientos de fans se topan con spoilers y cómo hay más afectados que beneficiados.