Siete entregas que revolucionaron la franquicia FIFA

Hay ciertas cosas que pase lo que pase nunca faltan a su cita: las películas bíblicas en Semana Santa, los incomprensibles anuncios de perfumes cuando se acerca la Navidad, la gran pelea entre partidos políticos cuando toca aprobar los Presupuestos Generales del Estado, la puja de los grandes clubs futbolísticos por realizar el fichaje más absurdamente caro como si con ello demostraran ser mejores y, hablando de fútbol, el lanzamiento de la correspondiente entrega anual de FIFA, la franquicia deportiva por excelencia de Electronic Arts que lleva sin abandonarnos desde el año 1993, es decir, desde que más de uno de nosotros éramos apenas unos micos y las videoconsolas no estaban ni de lejos tan extendidas como lo están ahora.

Pues bien, aprovechando que se cumplen 22 años desde su primera entrega (lo de celebrar números redondos no es nuestro fuerte) y que la propia FIFA está en boca de todos por una serie de escándalos que avergonzarían al mismísimo Jack el Destripador, nos ha dado por realizar un repaso a toda la saga de EA Sports sacando a relucir esos siete juegos (sí, pasamos de números redondos) que han marcado de una forma u otra la evolución de esta franquicia histórica; la cual tiene en FIFA 16 una nueva entrega que se venderá como churros aunque sus responsables decidan cambiar a Cristiano Ronaldo y Messi por Pokémons y al poderoso motor gráfico IGNITE por una sucesión de dibujos hechos con el Paint.

Empezamos por FIFA 94 (FIFA International Soccer) por mera lógica: lanzado a finales de 1993, es el primer videojuego de la franquicia, pero casi más importante, destacó por ser el primer videojuego futbolístico en contar con la licencia oficial de la FIFA, lo que le permitía bautizar con nombres reales a sus jugadores y equipos virtuales. Esto es algo que se agradece enormemente, puesto que los usuarios preferimos emular a Ronaldo que a Romualdo, igual que muchos prefieren una Coca Cola a las dieciocho versiones distintas de refrescos de cola de marca blanca existentes en el mercado. Tal que así de pijos somos. Sin embargo esto de bautizar como es debido a los jugadores no se aplicaría de forma estricta hasta FIFA 96.

FIFA 94 también destacó por apostar por la vista isométrica frente a la vista de pájaro típica de los simuladores deportivos de la época, además de prestar especial atención al apartado sonoro buscando una mayor inmersión para el jugador.

FIFA 96 quiso ser el primer FIFA desarrollado para una nueva generación de consolas, en concreto para la de 32 bits, capitaneada por Playstation y la nefasta Sega Saturn. Para ello desde EA Sports apostaron por introducir un nuevo motor gráfico en 3D, algo casi obligatorio en una época en la que los polígonos tridimensionales comenzaban a gobernar en este ocio electrónico.

Eso sí, lo único tridimensional aquí eran los estadios, quizás por aquello de que este famoso nuevo motor se llamaba ‘Estadio Virtual’. Los jugadores eran meros scripts en 2D, ofreciendo un resultado de ‘3D barato’ un tanto chungo. La serie no daría el salto definitivo a las 3D hasta FIFA 97, pero oye, por algún sitio hay que empezar.

Llegamos a la quinta entrega de la franquicia, la cual sirvió para asentar definitivamente unos pilares tan sólidos que se mantienen hasta hoy. FIFA 98 introdujo un nuevo motor gráfico mucho más vistoso, mejorando la calidad general, la fluidez de imagen, las animaciones y los mismísimos rostros de los jugadores, que ahora sí comenzaron a parecerse a seres humanos de verdad. Además trajo consigo por primera vez toda una serie de estadios reales fielmente recreados para la época.

Los modos de juego también se ampliaron significativamente, destacando ‘Rumbo al Mundial’ y el mítico ‘futbol sala’. ¡Ah! Y por primera vez en España pudimos disfrutar de un FIFA doblado al castellano con las voces de Manolo Lama y Paco González.

Aprovechando el tirón del mundial de Francia, desde EA Sports decidieron lanzar el primer videojuego de FIFA centrado exclusivamente en la Copa del Mundo. Y qué podemos decir, la jugada les salió redonda a términos comerciales, hasta el punto de que a día de hoy la siguen repitiendo de una forma u otra.

Como ocurre siempre en estos casos las novedades respecto al FIFA anterior (en este caso FIFA 98) eran mínimas, aunque la emoción que muchos sentimos al disputar un ‘mundial virtual’ en toda regla no nos la quitará nadie.

La generación de los 128 bits capitaneada por Playstation 2 no fue nada fácil para FIFA teniendo en cuenta que la franquicia Pro Evolution Soccer dominaba de forma indiscutible gracias a su atractiva jugabilidad. Sin embargo los chicos de EA Sports no desistieron en su empeño por recuperar el trono perdido, lanzando un FIFA 2002 que introdujo no pocas novedades dentro de la serie.

La personalización de los jugadores y de los equipos se llevó un paso más allá permitiendo al usuario hacer con ellos prácticamente cualquier cosa, desde realizar múltiples traspasos poco probables en la vida real hasta vender directamente a la estrella de turno a un mercader bereber a cambio de un par de dromedarios y cuarto de kilo de queso de cabra. Bueno, quizás esto último no sea cierto, pero nos sirve para daros a entender que los cambios fueron significativos, sobre todo a nivel puramente jugable al permitirnos controlar a los jugadores con una libertad nunca vista hasta entonces.

Allá por el año 2005 desde EA Sports se sacaron de la manga un FIFA Street con el que poder dejar atrás los grandes estadios para disfrutar del fútbol callejero, como todos sabréis mucho más atractivo al prescindir de esa figura que siempre se equivoca y sólo está ahí para molestar: los árbitros.

De esta idea acabó saliendo un título mucho más arcade, como salido de mezclar Street Figther con la serie televisiva Campeones (campechanamente hablando, ‘Oliver y Benji’) en la Thermomix de tu madre.

Llevamos desde 2012 sin ver un nuevo FIFA Street, por lo que suponemos que, más que una revolución dentro de la franquicia, esta aventura podría denominarse como un ‘idilio temporal no muy bien correspondido’.

Con la llegada de Xbox 360 y PS3 la tortilla volvió a dar la vuelta debido al pasotismo de Konami con PES. EA Sports volvió a dominar con cada nuevo FIFA, y entre ellas tenemos que sacar a relucir a FIFA 12, entrega de la que podríamos decir que beben directamente los tres últimos títulos lanzados hasta ahora.

FIFA 12 introdujo un nuevo motor, el Impact Engine, que llevaba un paso más allá las físicas y con ello el realismo visual al permitirnos contemplar como los jugadores entran en contacto entre sí sin ‘mezclarse’. Es decir, por primera vez pudimos ver como nuestros jugadores mantenían su independencia física al meterle un patadón al rival, entre muchas otras cosas.

Ah, y no nos olvidemos de su poderoso modo online, el cual ha sido potenciado hasta límites insospechados en las posteriores entregas con jugosos añadidos como Ultimate Team.

Vale, sabemos que es un poco osado meter en un reportaje sobre los videojuegos que han revolucionado a la franquicia FIFA un título que aún no ha llegado a las tiendas y sobre el que de hecho no se sabrá gran cosa hasta dentro de unas semanas. Sin embargo desde EA Sports han decidido adelantar una novedad que creemos realmente trascendente: la inclusión del fútbol femenino.

De esta forma parecen atender por fin a una petición puesta repetidas veces sobre la mesa por no pocos usuarios que no entienden que a estas alturas de la vida el futbol femenino continúe sin la menor representación dentro de los videojuegos, entendiendo que su introducción en la que hoy por hoy es la franquicia futbolística estrella puede potenciar enormemente su visibilidad.

Por ahora FIFA 16 tan sólo introducirá doce selecciones nacionales de fútbol femenino en muy pocos modos de juego (nada de ligas ni torneos online), por lo que la oferta sigue siendo muy inferior al fútbol masculino, pero como parece ocurrir siempre con esta franquicia, ¡por algún sitio hay que empezar! Imaginamos que si los jugadores y jugadoras responden bien, utilizando de forma continuada a dichos equipos en los partidos online y pidiendo más, desde EA terminarán por hacer lo correcto en FIFA 17, FIFA 18, etcétera etcétera.

Lo dicho, nos encontramos ante una gran franquicia que ha ido evolucionando de forma constante con los años, desde la época de los sprites en 2D hasta la actual generación, ofreciendo un realismo visual sorprendente y una infinidad de modos de juego que dan para decenas y decenas de horas. Bien es cierto que en muchas ocasiones, más bien casi siempre, se han echado en falta novedades de peso entre una entrega y otra, siendo discutible que al último juego lanzado se le pudiera considerar un ‘nuevo videojuego’ como tal; pero la realidad es que la evolución vivida por esta franquicia está aquí escrita, y vista desde la friolera de 22 años de distancia resulta cuanto menos sorprendente.

Y sí amigos, todo apunta a que, salvo apocalipsis nuclear, zombi o colapso financiero mundial, seguiremos teniendo nuevas entregas de FIFA año tras año hasta que el Sol se convierta en una estrella gigante roja capaz de convertir la Tierra en polvo.

¡Viva el fútbol virtual!