La Dirección General de Tráfico pone en marcha desde este lunes, 15 de diciembre, y hasta el domingo, 21 de diciembre, una nueva campaña de vigilancia y control de alcohol y drogas entre los conductores, cuyo principal objetivo es evitar que conductores que hayan ingerido sustancias se pongan al volante.
Con la finalidad de que esta campaña sea generalizada, la DGT ha invitado a las corporaciones locales, así como a los organismos autonómicos con competencia en la materia a sumarse a la misma e incrementar los controles y la vigilancia en sus respectivas vías.
La realización de estos controles preventivos por parte de las autoridades competentes, solamente la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil realizó el año pasado 6 millones de controles de alcohol y drogas, junto con la concienciación de los ciudadanos son dos de los factores que están contribuyendo a reducir el porcentaje de positivos preventivos de alcoholemia, pasando del 5% en 2001 al 1,7% en 2013.
Esta reducción significativa del porcentaje de positivos a alcohol, se quiere también alcanzar en el caso de las drogas, con la generalización de dichos controles en carretera.
Además, se pondrá especial énfasis en los colectivos policonsumidores, aquellos conductores que se ponen al volante y que consumen habitualmente alcohol y/o drogas.
Datos para recordar
El 25 por ciento de los fallecidos en carretera en Europa están relacionados con el alcohol, mientras que sólo el 1 por ciento del total de kilómetros recorridos son conducidos por personas con 0,50 g/l o más de alcohol en sangre, según datos del Observatorio Europeo para la Seguridad Vial (ERSO)
De las 100.000 pruebas de alcohol que los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil realizaron el año pasado a conductores implicados en un accidente, 5.131 dieron positivo a alcohol (5,1%).
Con una tasa de alcoholemia de 1,5g/l a 2,5 g/l, en sangre el riesgo de sufrir un accidente se multiplica por 15.
Excitabilidad emocional, disminución de la agudeza mental y capacidad de juicio, euforia en el conductor, tendencia a la inhibición emocional, impulsividad, agresividad al volante, disminución de la percepción del riesgo... son solo algunos de los efectos que provoca el alcohol y las drogas en la conducción.
El Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses en su memoria 2013 constata que de los 557 conductores fallecidos en accidente de circulación 240, es decir el 43,09% resultaron positivos en sangre a drogas y/o psicofármacos y/o alcohol.
Y de estos 240, 161 (67,08%) resultaron positivos a alcohol solo o asociados a drogas y/o psicofármacos y en 85 (35,42%) de los casos se detectaron drogas solas o asociadas con alcohol y/o psicofármacos.
Entre las drogas detectadas, la cocaína, el cannabis y los opiáceos derivados de morfina fueron los más comunes.