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CC.OO asegura que sólo se reconocen 1 de cada 15 enfermedades profesionales

Rioja2

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Las cifras oficiales sobre siniestralidad laboral nos sitúan ante un problema

social de primer orden con importantes consecuencias humanas y

económicas.

Alo largo del pasado año en España han sido 831 los trabajadores

fallecidos en accidente laboral, 9 de los cuales lo han sido en nuestraComunidad Autónoma.

Por lo que se refiere a las enfermedades laborales persiste el subregistro de

las mismas, ya que cada vez se declaran menos: en el año 2006 la cifra

oficial registrada fue 21.774 mientras que en el año 2008 la cifra es de

18.700 suponiendo un 14% menos que hace 2 años.

Igualmente en La Rioja, las enfermedades laborales declaradas fueron 365

en el año 2006 y 297 en 2008, es decir, un 18,5 % menos.

Esta infradeclaración de las enfermedades profesionales impide disponer de

datos reales sobre las mismas, ya que la cantidad que se declara es mínima.

Así, por ejemplo, frente a las 297 enfermedades profesionales aquí

declaradas en el año 2008 (datos del CEPROSS), el estudio “Impacto de las

enfermedades de origen laboral en España“, elaborado por ISTAS-CC.OO.,

estima que en nuestra Comunidad han sido 658, es decir, más del doble de

las declaradas. Se estima asimismo que, desde el año 2006, se han

originado un total de 15.045 enfermedades de origen laboral, de las que se

han declarado oficialmente 1.011, es decir, que solamente se han

reconocido 1 de cada 15 enfermedades de origen laboral.

Estos datos evidencian un incumplimiento de la Ley de Prevención de

Riesgos Laborales, creada precisamente para garantizar la seguridad y

salud de los trabajadores frente a los riesgos y sus consecuencias, es decir,

frente a los daños que producen los accidentes y enfermedades laborales.

Además de la obligación legal que dicha ley supone para las empresas, ésta

debe concebirse como una herramienta cuyo objetivo es evitar los costes

que la reparación de dichos daños supone.

Siguiendo con cifras oficiales, el coste económico de los accidentes de

trabajo solamente (sin tener en cuenta las enfermedades profesionales) para

el año 2008 ascienden a la friolera de 3.974.574 € para los accidentes

graves, muy graves y mortales y 798.706 € para los accidentes leves. Por

tanto, el coste total estimado de los accidentes ha sido de 4.773.280 €.

Como contrapartida, los costes de prevención estimados son,

respectivamente, de 251.193 € y 16.461 €. Esto supone que el coste

originado por el total de accidentes leves es 16 veces superior al gasto en

medidas preventivas y que hubieran podido evitar que éstos ocurrieran.

Esta proporción es de 48 veces en el caso de los accidentes graves, muy

graves y mortales.