“César Remón no va a ser jugador del Cartagena. La nuestra era la opción prioritaria -la mejor económicamente hablando pero de de un año y medio de duración- pero hay que respetar lo que decida el jugador”. Así se expresó el pasado viernes Paco Belmonte, propietario del Cartagena, que también confirmó que contaba con una oferta de dos años y medio de la UD Logroñés que, evidentemente, no iba a rechazar. El lunes llegó el momento de conseguir la desvinculación con el UCAM Murcia, así que era cuestión de tiempo que la entidad blanquirroja anunciara la llegada del futbolista riojano César Jesús Ramón Aguirre, Logroño 2 de octubre de 1985.
De esta manera, el centrocampista se ejercitará este miércoles con sus nuevos compañeros y es más que previsible que pueda ser de la partida para el domingo si Rafa Berges lo estima oportuno. El jugador procede de un club de Segunda división, donde no ha contado para su exentrenador, Francisco. Sin embargo, en el conjunto murciano, como en todos las escuadras que ha militado, ha sido piedra angular. No en vano, una de las cualidades de este logroñés de 31 años es su capacidad de liderazgo -el brazalete de capitán le ha acompañado casi siempre-.
“Estoy muy contento de volver a casa”, esas han sido sus primeras palabras como nuevo jugador blanquirrojo. Admite que “he dejado cosas por venir aquí, pero me ha ilusionado mucho el proyecto que tanto Rafa Berges como Carlos Pouso me propusieron”. Respecto a repetir presencia en la fase de ascenso, reconoce que “no podemos marcarnos objetivos a largo plazo porque luego es cuando se fracasa, hay que pensar en ganar al Fuenlabrada”. Por último, lanza un mensaje a la afición, a la que pide que “confíe, que nos vamos a dejar la vida por este escudo”.
Además de los 63 partidos defendidos con la camiseta del UCAM Murcia, incluido el ascenso a Segunda vivido el pasado verano, ha estado en Alavés B, Peralta, Castellón, Alfaro (2008/09), Denia, Ontiyent y Alcoyano, donde coincidió por segunda vez -antes lo hizo en el Castellón con Carles Salvador-. La presencia de César Remón, por el momento, no afecta a la lista de bajas, por cuanto la UDL contaba con una ficha senior libre. Eso sí, la situación de Miguel Santos -lesionado de gravedad en el partido de vuelta de la fase de ascenso a Segunda contra el Sevilla Atlético- queda a expensas de que exista alguna marcha.
En este sentido, se continúa especulando con la posible llegada de Pere Milla, propiedad del Eibar pero cedido al UCAM Murcia, donde no cuenta con minutos. La prioridad del conjunto armero es que sea otro conjunto de Segunda el que se haga con sus servicios estos próximos meses, pero parece que sólo en Segunda B tendría garantizados los minutos que desea el club vasco. Sin duda, el retorno del que fuera máximo goleador la temporada pasada de la UDL relanzaría la ilusión al aficionado.