Las organizaciones sindicales ANPE, CCOO, CSIF, STE Y UGT, participantes en la negociación de la futura orden de la Consejería de Educación que regula las listas de aspirantes a interinidad en los centros públicos de La Rioja, han decidido no firmar el último borrador, ya que modifica unilateralmente la anterior orden, firmada por todos los sindicatos.
Ante la inminente publicación de forma unilateral y sin acuerdo con las organizaciones sindicales de la Orden que regula los listados de aspirantes a interinidad, ANPE, COO, CSIF, STE Y UGT han solicitado al consejero de Educación, Abel Bayo, la convocatoria urgente de la Mesa Sectorial de Educación para empezar la recuperación de derechos.
“En los últimos años la precarización del empleo y la inestabilidad en las plantillas del sistema educativo riojano, acumulándose hasta un 27% de tasa de interinidad, ha repercutido notablemente en la calidad de la educación”, han asegurado estos sindicatos, que creen que la crisis ha impedido que se convoquen ofertas de empleo público suficientes y acordes con las necesidades, lo que supone “un nuevo recorte en nuestros derechos”.
“Nos encontramos con centros en los que prácticamente toda la plantilla está cubierta por profesorado interino. Por ello demandamos que se convoquen plazas suficientes para estabilizar plantillas y mejorar y estabilizar el empleo”.
Han recordado que en 2006 todas las organizaciones sindicales, junto con la Administración, firmaron un acuerdo que, “basado en la igualdad, mérito y capacidad, regulaba la provisión de los puestos de trabajo”. Reconocen que, aunque no todo el profesorado interino estuviera conforme, “el hecho de haber sido aprobado por todas los sindicatos y la Administración daba credibilidad y valor al citado acuerdo”.
Pese a que consideran necesario introducir algunas modificaciones en dicha Orden, no creen que esto deba hacerse en estas fechas, a tres meses de las oposiciones, ya que se está generando “mucha incertidumbre” en los más de 1.400 profesores que forman el colectivo interino.
Además, han admitido que la presión y las propuestas de las organizaciones sindicales en la mesa de negociacion “han surtido efecto” y las modificaciones que se han producido desde el primer borrador hasta el documento final “han supuesto cambios que han contribuido a mejorar considerablemente la futura Orden, pero no ha sido suficiente en aspectos fundamentales para que la mayoría sindical la apoye”.