El director de la Unidad de Sueño del Hospital Quirón de Valencia, Gonzalo Pin, explicó, con motivo del retraso de la hora que se producirá el próximo domingo 26 de octubre, que el cambio de horario puede tener consecuencias en algunas personas, tales como alteraciones del sueño, irritación o distimia.
En la madrugada del domingo, a las 3 horas los relojes se atrasarán una hora para dar entrada al nuevo horario de invierno, lo que, según explicó el experto, “no sólo cambia el ciclo de la vigilia, sino que también lo hace el sistema hormonal”. Según señaló, el ritmo circadiano cambia, y esto tiene ciertas consecuencias, aunque subrayó que en este caso “se trata de trastornos transitorios que no tienen importancia, aunque estadísticamente haya algunos accidentes”.
En este sentido, apuntó que en la población adulta los cambios tardan tres días en normalizarse, en los cuales hay una mayor predisposición a cometer errores, “porque el organismo antes estaba acostumbrado a dormir”.
En cuanto a la población infantil, el experto destacó que “los niños se adaptan más facilmente que los adultos al cambio de horario pero, en algunos casos, pueden estar más irritados y presentar más somnolencia los primeros días”.
Por otro lado, explicó que las personas enfermas o que sufren algún tipo de trastorno como el insomnio, alteraciones del ritmo circadiano o del nivel hormonal (debido a el tratamiento con corticoides, por ejemplo) pueden sufrir mareos y alteraciones del estado de ánimo que pueden durar una semana.
En este sentido, el doctor Pin señaló que estas personas pueden manifestar dificultades para iniciar el sueño, distimina o alteraciones del carácter a causa del cambio de hora, ya que “el sistema hormonal no se ha adaptado aún”. AUSENCIA DE LUZ
Con el cambio de hora amanecerá más temprano y anochecerá antes, por lo que el doctor Pin añadió que esto puede influir de manera ligera en la vida de las personas. “La ausencia de luz natural o falta de inundación lumínica a través de los ojos puede producir cambios de humor en el carácter”. “La luz es fundamental para el estado de ánimo”, añadió.
Para evitar las consecuencias que puede tener el nuevo horario, el experto en sueño aconsejó “iniciar cambios progresivos una semana antes del cambio del horario, y adelantar todas las actividades diez minutos cada día, como el tiempo que se dedica a pasear, a la comida, para readaptar así al organismo”.