Efectivos de la Guardia Civil en La Rioja pertenecientes al Puesto de Casalarreina han detenido a la detención de un varón de 38 años, natural de Ermua (Álava) y vecino de Tirgo (La Rioja), al que le consta un amplio historial delictivo y numerosas infracciones graves contra la seguridad vial.
Se le imputa un delito por conducción temeraria con manifiesto desprecio por la vida de los demás, dos delitos por conducir vehículo a motor careciendo de permiso de conducción por pérdida total de puntos asignados, dos delitos por conducir vehículo a motor tras haber sido privado de manera cautelar de su permiso por decisión judicial y, por último, un delito de daños tras provocar la salida de la vía de otro conductor.
Los hechos que han dado lugar a esta detención se inician sobre las 06:30 horas del 15 de septiembre, cuando una patrulla del Puesto de Casalarreina, detecta la presencia de un varón, al que le consta una suspensión cautelar de su permiso de conducir por decisión judicial, saliendo del interior de las oficinas de la gasolinera de Cuzcurrita.
Esta persona al percatarse de la presencia de los agentes emprende la huída en un vehículo marca Ford, iniciándose por parte de la patrulla un seguimiento por la LR-307, N-232 y N-124, en la que en todo momento hace caso omiso a las señales acústicas y luminosas, conduciendo de forma manifiestamente temeraria y a gran velocidad.
Durante su huída invade constantemente el carril contrario, poniendo en grave riesgo la vida del resto de usuarios de la vía, provocando que un turismo tenga que salirse de la calzada para evitar una colisión frontolateral, por lo que los agentes cesan el seguimiento, a fin de evitar hechos similares debido a la gran afluencia de tráfico rodado.
El dispositivo establecido para la localización del conductor, permite su detención en la mañana del día 22, cuando conducía el mismo vehículo por la calle Severo Ochoa de Haro.
Una vez en dependencias de la Guardia Civil de Casalarreina, el detenido se acoge a su derecho de no declarar, por lo que una vez finalizadas las diligencias es puesto a disposición de la autoridad judicial.
El artículo 381 del Código Penal establece penas de prisión de dos a cinco años, multa de doce a veinticuatro meses y privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores durante un período de seis a diez años, a la persona que condujere un vehículo a motor o un ciclomotor con manifiesto desprecio por la vida de los demás.