Se sabía desde el principio que el Araski no era el mejor equipo al que visitar viniendo de una mala racha de resultados. Y es que si por algo destaca el equipo entrenado por Madelén Urieta es por no dar un respiro al contrario durante todo el partido. Con esa filosofía está logrando un inicio de liga espectacular, en el que ya ha conseguido cinco victorias, las tres últimas consecutivas.
El encuentro comenzó con muchas imprecisiones por parte de ambos equipos. Como en anteriores encuentros, la primera canasta del Promete se hizo esperar. Fue pasados tres minutos cuando Vanessa Guidden consiguió anotar bajo del aro. Para entonces el Araski llevaba ya cinco puntos, logrados por medio de un triple y de una canasta desde la zona. La cosa no mejoró para las visitantes en los siguientes minutos y Jacinto Carbajal tuvo que pedir tiempo muerto a mitad del cuarto, cuando el marcador marcaba un 10-02.
La charla técnica tuvo sus efectos, ya que hubo una notable reacción por parte de las visitantes en los siguientes minutos. Lideradas por Guidden, las riojanas consiguieron reducir las diferencias hasta solo dos puntos (12-10) y propiciaron que fuese Madelén la que pidiese tiempo muerto. El equipo local consiguió anotar siete puntos en los menos de dos minutos que quedaban para el final de cuarto; los tres últimos por medio de un triple sobre la bocina que dejaban un 19-11 en el marcador.
En el segundo cuarto Promete volvió a tardar en anotar, mientras que Araski comenzó a crear un importante colchón de puntos a su favor. Así, hasta el 5:42 el equipo de Jacinto Carbajal no había conseguido mover su marcador. Lo hizo por medio de dos tiros libres de Leia Dongue, espléndida durante todo el encuentro (23 puntos, 9 rebotes, 27 de valoración). Con 29-15 se llegó al ecuador del cuarto, una diferencia de puntos que solo aumentaría en 3 al llegar al descanso. 39-22 fue el resultado con la que se cerro la primera parte: 17 puntos abajo y muchas dificultades para crear peligro desde fuera de la zona.
Tras el descanso se vio a un Promete más activo, con ganas de poner difíciles las cosas a las vitorianas, aunque el acierto de las segundas en los momentos clave hizo que las buenas rachas visitantes apenas hiciesen mella en el marcador. Vanessa y Leia siguieron tirando del carro en cuanto a anotación y en una buena sucesión de jugadas lograron poner a su equipo 45-32. No obstante, los fallos en el tiro exterior siguieron haciéndoles mucho daño, así como las pérdidas de balón, ante las que el Araski respondió con un buen juego coral. Así, la distancia siguió aumentando poco a poco y se llegó al final del tercer cuarto con 58-42.
En los últimos diez minutos Promete volvió a tener una buena salida, con mucha intensidad y un juego colectivo más dinámico. Leia puso la quinta marcha y complicó mucho las cosas a la defensa vitoriana. No obstante, el Araski no bajó ni un ápice su concentración e incluso con una ventaja considerable (65-44 a 7:05 del final) siguió manteniendo una felina presión en campo contrario.
Promete consiguió reducir notablemente la diferencia en los minutos siguientes (67-52 a 3:00), pero tanto los triples (30% de efectividad) como los tiros libres (42%) se le atragantaron e imposibilitaron que el Araski viese peligrar la victoria. A pesar de la distancia ya casi insalvable ninguno de los dos equipos bajó la intensidad hasta que sonó la última bocina, que dejó un 72-53 en el marcador.
Con esta derrota el CD Promete se mantiene con dos victorias en ocho partidos disputados y ocupa momentáneamente la décima plaza en la clasificación.