El embajador cubano en España, Alberto Velazco San José, abandonará su puesto “después del verano”. Al parecer, su marcha no tiene “nada que ver” con el reciente incidente entre agentes del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) -perteneciente al Ministerio de Defensa de España- destinados en Cuba y las autoridades de la isla, según fuentes diplomáticas.
Ayer, otras fuentes consultadas por Europa Press relacionaron la marcha de Velazco con el reciente cambio producido en la Cancillería cubana -equivalente al Ministerio de Asuntos Exteriores-, con la sustitución del destituido Felipe Pérez Roque por Bruno Rodríguez.
Así las cosas, el Gobierno español debería dar su opinión favorable al diplomático designado por La Habana, que al parecer ya ha sido presentado, confirmando así que no tiene ningún elemento para oponerse al nombramiento de la persona que Cuba propone.
La solicitud de aprobación se hace por medio de nota verbal acompañada de una biografía de la persona propuesta. Tras la recepción de la solicitud, España suele esperar un periodo de tres semanas hasta dar una respuesta, para dar tiempo a que los servicios correspondientes estudien la idoneidad del candidato.