La selección española de waterpolo superó con autoridad a Montenegro (12-6) en la cuarta jornada de la competición masculina de los Juegos Olímpicos, una victoria de prestigio frente a la campeona europea en la que los hombres de Rafa Aguilar han lanzado su candidatura a las medallas.
Tras las victorias frente a Canadá (16-6) y Australia (10-9) y la derrota con Hungría (5-8), el partido de hoy se presentaba como el punto de inflexión para el equipo español, el día en el que se tocarían los cuartos con la mano o habría que esperar. España no falló gracias a una superioridad apabullante y está casi clasificada para cuartos a falta de un partido contra Grecia, ya eliminada.
El triunfo se cimentó en el primer tiempo, con una salida en tromba que ha pillado a los campeones de Europa muy descolocados. Agarrados a la incuestionable jerarquía de Guillermo Molina en la piscina, los españoles funcionaron como un engranaje perfecto en que todos defendían y atacaban, lo que explica el 3-0 que ya lucía el marcador en apenas seis minutos.
El segundo cuarto resultó calcado al primero, con otro gol de Molina que estimuló a que se sumarán a la fiesta Vallés, Perrone y Martín, con Iñaki Aguilar cerrando la portería cuando era necesario. Montenegro se encontraba noqueada, desbordada en todos los frentes y sólo Ivovic perforó la red en todo el primer tiempo.
Con el partido casi sentenciado al descanso (7-1), los balcánicos intentaron una remontada épica apoyados en la docena de superioridades que disfrutaron a lo largo del encuentro, por apenas cuatro favorables a España. Janovic despertó a los suyos, pero dos golazos de Iván Gallego y Javier García enterraron las esperanzas montenegrinas, que perdieron su condición de invictos en la competición.
España se impuso también en un último cuarto más relajado (2-1) porque los dos equipos tenían ya la cabeza en la decisiva jornada final de la primera fase, donde el equipo español se lo juega todo, ya que puede acabar como primera de grupo y acceder directamente a semifinales o, en el peor de los casos, quedarse fuera de los cuartos, posibilidad muy improbable tras su gran triunfo de hoy.