Nelson Mandela recibió hoy el homenaje del mundo por su lucha por una humanidad mejor en el día de su 92 cumpleaños, una fecha que la ONU ha dedicado al que fue el primer presidente negro de Sudáfrica y Premio Nobel de la Paz.
En su casa del barrio de Houghton, en Johannesburgo, el ex gobernante recibió a varios viejos amigos, entre ellos al ex primer ministro de Zambia Kenneth Kaunda, informó la Fundación Mandela, mientras en la calle docenas de personas también llevaban, en carteles y postales hechas a mano, sus felicitaciones al ex gobernante sudafricano.
Sus nietos y biznietos le cantaron más tarde el “Cumpleaños feliz” y, después, muchos de ellos y otros familiares, incluida su esposa, Graça Machel, dedicaron el resto de la mañana a los 67 minutos de trabajo social promovidos en todo el mundo por el Día de Nelson Mandela.
Mandela y Machel celebraron también hoy el doce aniversario de su boda y a la reunión acudió la ex esposa del líder negro sudafricano, Winnie Mandela, en un acto en el que ministros de varias religiones elevaron sus plegarias por los fallecidos de la familia.
Machel recordó, en declaraciones a medios locales, el aniversario de su boda con Mandela, del que dijo que “está bien de salud” y “su espíritu mejor que nunca”, antes de afirmar: “Es un privilegio tener una vida con él”, mientras hacia sus 67 minutos de trabajo en un centro para niños con problemas en el barrio de Orlando, en Soweto.
Los 67 minutos de la campaña del Día de Nelsón Mandela, uno por cada año que él dedico a la lucha por la libertad, la paz y la reconciliación, los hizo el actual presidente de Sudáfrica, Jacob Zuma, en la aldea de Mvezo, el lugar de nacimiento de “Madiba”, el nombre de su clan y como le conocen cariñosamente los sudafricanos.
En un acto organizado por el gobernante Congreso Nacional Africano (CNA) en Mvezo, que centró las celebraciones oficiales de la jornada, Zuma recalcó que entre las enseñanzas legadas por Mandela destaca el “trabajar juntos para fortalecer la unidad y la solidaridad en nuestro país”.
“Os insto a seguir el espíritu de unidad africana, amor y amistad” de Mandela, agregó Zuma, en un país donde en las últimas semanas se han registrado amenazas y agresiones a inmigrantes africanos, que hacen temer una ola de ataques xenófobos como los que causaron más de 60 muertos en mayo de 2008 en varios lugares de Sudáfrica.
Un centenar de dirigentes del CNA, Zuma incluido, en sus 67 minutos de trabajo para la comunidad plantaron árboles y remozaron la escuela de Mvezo, donde varios miles de personas de toda clase y condición se concentraron para celebrar el 92 cumpleaños de Mandela.
Según señaló la Radiotelevisión Sudafricana (SABC), los concentraron en Mvezo “llegaron unos en helicóptero y coches de lujo y otros en caballerías o caminando”, en un país que 16 años después de la elección de Mandela como su primer presidente negro sigue siendo uno de los que registra mayor desigualdad en el mundo.
La celebración, una semana después de finalizar en Sudáfrica el Mundial de Fútbol 2010, que ganó España y considerado un éxito por sus organizadores y el Gobierno, pone también el colofón a más de un mes en el que el país ha estado en el centro de la atención internacional y que pretende utilizar para proyectar su futuro.
Algunos comentaristas han recordad hoy que Sudáfrica, la primera economía africana, 16 años después de la caída del “apartheid” tiene aún más del 25 por ciento de desempleo y millones de pobres.La economía, en su mayor parte, sigue en manos del 9 por ciento de blancos y un pequeño grupo de negros enriquecidos en las últimas dos décadas
, muchos de ellos relacionados con el gobernante Congreso Nacional Africano (CNA), el partido de Mandela.
El sindicalista y defensor de los Derechos Humanos Jay Naidoo, ataviado con una camiseta del Día de Mandela, se mostró “optimista” y señaló hoy que los ciudadanos “no van a aceptar más la mediocridad de nuestra sociedad” y, tras el éxito del Mundial de Fútbol, van a reclamar una gestión eficaz para resolver los problemas sociales.
Naidoo, que fue ministro de Desarrollo en el Gobierno de Mandela, dijo a la TV local “e.News” que los sudafricanos reclaman “escuelas y hospitales”, con sistemas de salud y educativos dignos, y también “agua. electricidad y casas”, de las que se ven privadas millones de personas que viven en barrios chabolistas en condiciones indignas.