El ciclista holandés Robert Gesink (Rabobank) arrebató el liderato de la París-Niza al francés Sylvain Chavanel (Cofidis) tras la celebración de la cuarta etapa de la prueba, disputada entre las localidades de Montélimar y el Mont Ventoux sobre un recorrido de 176 kilómetros, en la que se impuso el australiano Cadel Evans (Silence-Lotto).
Evans y Gesink llegaron en solitario a la línea de meta después de una escapada que culminaron a falta de cinco kilómetros. Gesink, que llevó siempre la iniciativa y a sabiendas de que una victoria le daría el maillot de líder, dejó alzarse con la victoria al segundo clasificado en el pasado Tour de Francia, que entró primero sin oposición del corredor tulipán. El ciclista de Rabobank, consciente de la distancia que iba abriendo con Chavannel, atacó sin miedo en el Mont Ventoux y acabó culminando una escapada brutal. De esta forma, el holandés se alza con el liderato por delante del italiano Davide Rebellin (Gerolsteiner), cuarto en la etapa, y segundo en la general a 32 segundos.
En cuanto a los españoles se refiere, Juan Manuel Gárate (Lampre) mantiene sus opciones tras perder poco más de un minuto y está en la general a 1:06, aunque Luis León Sánchez (Caisse d'Epargne) también tuvo su protagonismo al ostentar el liderato virtual. Al final, acabó a más de dos minutos de Evans y Gesink (2:18) y se queda sexto en la general a 2:06, por delante de Gorka Verdugo (Euskaltel).
Este viernes la París-Niza arranca en la localidad de Althen-des-Paluds y finaliza en Sisteron después de 172,5 kilómetros de recorrido. Una etapa con un puerto de segunda categoría, el Col de Murs, a los 30 kilómetros de dar comienzo la misma. El pelotón tendrá que pelear con otros puertos de menor envergadura, tres de tercera categoría y dos de quinta.