La precandidata demócrata, Hillary Clinton, ha resultado ganadora de las primarias en Pennsylvania frente a su rival Barack Obama, lo que mantiene viva sus esperanzas de continuar en la carrera por la nomiación de su partido para luchar por la presidencia de la Casa Blanca.
En concreto, con un 90 por ciento escrutado, la senadora por Nueva York obtiene el 55 por ciento frente al 45 por ciento de Obama en el estado de Pennsylvania, donde hay 158 delegados en juego, según informa la emisora de televisión estadounidense CNN.
Muchos analistas consideran que la barrera del éxito para Hillary es el 10 por ciento de ventaja, un margen ajustado, aunque quedan todavía nueve elecciones programadas antes de que concluya la campaña, el 3 de julio. La carrera pasa ahora a la votación del 6 de mayo en Carolina del Norte, donde Obama es el favorito, y a Indiana, donde Clinton tiene una leve ventaja.
Durante el discurso pronunciado ante sus seguidores congregados en Pennsylvania, Clinton agradeció a todos el apoyo brindado y puntualizó que para ella, esta prueba es “una batalla personal” porque es la tierra de donde proviene su abuelo y su padre, y según dijo, le tiene mucho aprecio. “Con esta victoria estoy celebrando los deseos de gente como vosotros, gente que nunca se esconden frente a la adversidad y nunca dejan de creer en América”, añadió.
LUCHA
“Tanto el senador Obama como yo hemos luchado durante estas últimas seis semanas”. “Hicimos lo mejor que pudimos y vosotros habéis elegido (...) pero ahora el viento sopla a mi favor”, añadió Clinton. Aun así, y a pesar de ser la triunfadora de estas primarias, su campaña está endeudada, por lo que instó a sus partidarios a visitar su sitio en Internet y realizar donaciones.
“El futuro de esta campaña está en sus manos”, dijo Clinton, quien estuvo acompañada en el escenario por su marido, el ex presidente Bill Clinton, y su hija Chelsea.
La senadora se comprometió a luchar por los derechos de los americanos “no en general, sino uno a uno”, y recalcó la importancia que tiene mejorar en aspectos claves como la economía, la asistencia médica y el aumento del precio del petróleo.
Sabéis que podéis contar conmigo cada día que pase en la Casa Blanca“. ”Necesito vuestra ayuda para seguir luchando; esta es vuestra campaña y vuestra victoria, y sólo podemos seguir compitiendo y ganando“, dijo una emocionada Clinton.
La ex primera dama también tuvo palabras para quienes “la daban por perdida, pero los americanos no se rinden y se merecen un presidente que tampoco se rinda”. “Hay gente que me quiere fuera de la campaña presidencial pero Pennsyvania me quiere dentro”, resaltó.
RETOS
Por su parte, el precandidato Obama, que se encuentra ya en Indiana preparándose ante la próxima primaria que se celebrará en ese estado, felicitó a su rival por la victoria obtenida, y puntualizo, ante todos sus seguidores, que su objetivo sigue siendo cumplir los retos propuestos.
“Los retos a los que nos enfrentamos vienen de lejos”. “En cada elección los políticos dicen lo que queremos oír, y hacen muchas promesas”, afirmó. “Se gastan miles de dolares en sus campañas en vez de luchar por el sistema médico, el escolar (...)”. “Y eso pasa año tras año (...) pero os puedo decir que esta elección será diferente”, añadió.
“Podemos ser un partido que no tenga problemas para obtener dinero, podemos pretender representar a los americanos durante cuatro años mas como han hecho hasta ahora la mayoría de los políticos, o podemos reconocer que vosotros sois los campeones de América, porque os escucharemos”, sentenció Obama.
Las normas demócratas permiten que los perdedores en cada estado ganen una cantidad proporcional de delegados, lo que da a Obama grandes porciones de delegados, aún cuando pierde. Eso significa que Clinton debe ganar la mayoría de las nueve votaciones restantes por márgenes amplios para tener una oportunidad de reducir la ventaja de Obama.