La consejera de Agricultura, Ganadería, Mundo Rural y Medio Ambiente, Noemí Manzanos, junto con el presidente del Consejo Regulador de la DOCa Rioja, Fernando Ezquerro, ha suscrito este jueves un convenio para el desarrollo de un modelo de inteligencia artificial para monitorizar y predecir parámetros clave en viticultura de la Denominación de Origen Calificada Rioja por un importe de 400.000 euros. El objetivo del convenio es establecer el marco de financiación para impulsar y ejecutar la puesta en marcha de una herramienta de predicción de rendimientos a través de inteligencia artificial. La vigencia del presente convenio se extenderá hasta el 31 de diciembre de 2025.
En este sentido, Noemí Manzanos ha apuntado que “la innovación y la digitalización nos abrirán nuevas puertas en el futuro”. Además, ha expresado el compromiso para que, “el sector vitivinícola cuente con las mejores herramientas que les ayude en su día para tomar las mejores decisiones para mantener la calidad y la excelencia de nuestros vinos”.
Esta subvención, enmarcada dentro del programa AGROALNEXT, forma parte del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR), cuenta con una financiación al 65% de los fondos Next Generation del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia (MRR), mientras que el otro 35% parte de fondos del Ejecutivo riojano. Además, a través de este convenio se pretende financiar la actividad no económica que realiza el Consejo Regulador de la DOCa Rioja en materia de I+D+I para el desarrollo de un modelo de inteligencia artificial.
Asimismo, esta herramienta se considera esencial para un mejor control en la producción de las parcelas agrícolas que permita a los agricultores una adaptación de sus técnicas de cultivo durante cada campaña y lograr unos rendimientos de calidad en las uvas finalmente vendimiadas.
El presidente del Consejo Regulador de la DOCa Rioja, Fernando Ezquerro, ha afirmado que “este proyecto nos va ayudar a seguir apostando por la calidad con un conocimiento mucho mayor del viñedo. Nos va a dotar de una gran información a los viticultores para tomar decisiones que nos ayuden a realizar un mejor Rioja dentro de una viticultura sostenible, este proyecto tiene mucho que ver con la sostenibilidad y la responsabilidad desde el viñedo”.
Por su parte, el director técnico en el Consejo Regulador de la DOCa Rioja, Pablo Franco, ha apuntado que para “el viticultor es muy importante esta herramienta porque le ofrece un mapa productivo, permite una monitorización precisa y en tiempo real de cada parcela, facilitando decisiones informadas de cara al viticultor”.
La Denominación de Origen Calificada Rioja es una de las regiones vinícolas más extensas (67.000 hectáreas) y con una gran diversidad geográfica y climática. Esta diversidad es un factor clave para la diferenciación de los vinos de la región, pero también presenta desafíos únicos para los viticultores. La directora general de Agricultura y Ganadería, María Jesús Miñana, ha destacado que para la Consejería “resulta fundamental trabajar en la digitalización del sector, es una palanca clave para contribuir a la sostenibilidad y a la rentabilidad económica”. Por ello, ha subrayado “debemos ser capaces de digitalizar a todo el sector”.
El sector del vino constituye el 5,3% del VAB de la comunidad autónoma y representa el 21,2% de la actividad vitivinícola en el conjunto nacional. La Rioja, por tanto, es una economía especializada donde el vino no solo constituye el principal activo económico, sino que se muestra como su carta de presentación en el mundo entero. España es el primer país en el mundo por hectáreas de viñedo y el tercer productor mundial. En el conjunto de España, la viticultura, la elaboración del vino y su comercialización generan un valor añadido bruto (VAB) superior a 23.700 millones de euros anuales, lo que supone el 2,2% del VAB nacional y genera más de 400.000 puestos de trabajo.