Izquierda Unida considera necesaria “una nueva orientación de las políticas comunitarias, adaptadas a un nuevo entorno y asentadas sobre principios firmes y realistas”. Esto significa, según explican, que la Unión Europea “debe renovar su apuesta estratégica por la agricultura, garantizando un mínimo de abastecimiento alimentario, dentro de la apuesta que hace IU por la soberanía alimentaria y la preservación del medio ambiente y el medio rural”.
Así, este nuevo enfoque de la política agraria “pasa por el rechazo a las políticas liberalizadoras que pueden condenar a la desaparición a medio plazo de los pequeños agricultores”, afirman desde la coalición.
En el caso de La Rioja, esto se concretaría, según explican, “en el rechazo de la nueva OCM del vino, que plantea un calendario para la liberalización de las plantaciones que podría suponer el fin de la Denominación de Origen Rioja, tal y como la conocemos”. “Hay que recordar que, por primera vez en muchos años, el rechazo a la nueva OCM del Vino ha puesto de acuerdo en La Rioja a todo el sector: productores, comercializadores, embotelladores, etcétera”, añaden.
Por otro lado, IU defiende un nuevo concepto de agricultura social: profesional, sostenible y multifuncional que haga frente a los nuevos desafíos del sector. Entre las medidas propuestas por IU estarían el aseguramiento de la calidad del agua en todas las fases de aprovechamiento, que garanticen su correcta utilización, la potenciación de la agricultura ecológica, del mercado interno, local y de los canales comerciales cortos, con ayudas a quienes se incorporen a la producción ecológico, mayor adaptación de los seguros agrarios a las realidades de las producciones agrícolas y ganaderas, así como al cambio climático, rechazo al cultivo de variedades transgénicas y de los biocombustibles y el apoyo a políticas de desarrollo rural cuyo eje sea la actividad agraria.