Tokio cierra con una bajada drástica del 10% y dejándose algo más de 1.000 puntos. En una jornada de infarto dentro y fuera de la Bolsa nipona por la amenaza de la crisis nuclear, al final ha terminado contagiando a las Bolsas europeas que al inicio de la sesión abrían en rojo.
La réplica del tsunami bursátil ha llegado al Ibex-35 que baja un 2,54% a media jornada. En Europa, la Bolsa más castigada es la de Fráncfort que retrocede casi un 5%, París baja un 3,64% y Londres un 2,74%.
Se espera un martes aciago generalizado en parte por la inyección constante de liquidez del Banco de Japón para salvaguardar su economía. Ocho billones de yenes han tenido que emitir las autoridades niponas para garantizar su estabilidad financiera. A lo que se suman los 130.000 millones del lunes.