El 8 de enero, y tras un año cerrada, se abrió la cuarta planta del Hospital San Pedro. Desde entonces los trabajadores han ido encadenando contratos semanales hasta hoy. Ahora mismo en esta planta hay un paciente ingresado atendido por una enfermera y por un auxiliar, no hay más personal. Y según los trabajadores “en cuanto quede alguna cama libre en otra planta lo más seguro es que lo trasladen”.
El resto de las 19 camas de esta planta están bloqueadas. “En el ordenador no aparece el mapa de camas”, cuentan. Esto quiere decir que en caso de que alguien llegue a urgencias y necesite ser ingresado deberá permanecer en urgencias a la espera de una cama libre en otra planta o ser derivado a la privada“.
Los trabajadores de la sanidad pública riojana censuran que el Gobierno de La Rioja siga manteniendo conciertos y derivando pacientes a la sanidad privada mientras el Hospital de La Rioja cuenta con un centenar de camas libres además de estas 20.