La Rioja adquirirá tres equipos de diagnóstico y tratamiento del cáncer, con los 4,8 millones de euros donados por la Fundación Amancio Ortega. Para ello, está mañana se ha firmado un protocolo por parte del presidente del Gobierno regional, José Ignacio Ceniceros, y el vicepresidente de la Fundación, José Arnau.
En concreto, el Sistema Público de Salud contará gracias a esta aportación con dos nuevos aceleradores lineales y un mamógrafo digital, que según ha indicado Ceniceros suponen dar un “salto cualitativo”, puesto que incorpora “tecnología más avanzada que permite aumentar la precisión de los tratamientos, mejorar el control de la enfermedad, ampliar la supervivencia y calidad de vida de los pacientes, así como ayuda a abrir nuevas oportunidades en investigación”.
En el acto, celebrado esta mañana en el Palacio de Gobierno, han participado también, la consejera de Salud, María Martín y el Gerente de Fundación Rioja Salud, Javier Aparicio, además de representantes de los profesionales sanitarios, como los responsables de los servicios de Oncología Radioterápica y Medicina Nuclear, así como representantes de las asociaciones de pacientes oncológicos, como FARO, AECC, y de la Asociación Jóvenes con Cáncer.
INVERSIÓN EN RIOJA BAJA
El presidente ha explicado que el Sistema Público, destinará los 4,8 millones de euros que dona la Fundación a comprar un mamógrafo digital que se instalará en el hospital de Calahorra para dar servicio a la Rioja Baja y dos aceleradores lineales de última generación, que sustituirán a los que actualmente prestan servicio en el Área de Oncología Radioterápica, de la Fundación Rioja Salud y “que van a permitir realizar diagnóstico más precisos, proporcionando a los pacientes tratamientos más eficaces, menos agresivos y de menor duración”.
En concreto, con los dos nuevos aceleradores lineales podrán realizarse tratamientos localizados de cirugía o radioterapia en detrimento de tratamientos más agresivos para el paciente. Por su parte, el nuevo mamógrafo, incorpora alta tecnología que permite diagnosticar lesiones muy pequeñas y sutiles, que a veces quedan ocultas en la mamografía digital ordinaria.
LUCHA CONTRA EL CÁNCER
Tanto por su elevada prevalencia como por el aumento en la complejidad de su diagnóstico y tratamiento, el cáncer es una prioridad indiscutible para el Sistema Público de Salud de La Rioja. Es por ello que este acuerdo de colaboración con va a permitir mejorar de forma importante los recursos diagnósticos y terapéuticos destinados a todas las personas con cáncer. Cada año fallecen en La Rioja unas 900 personas por cáncer, lo que representa la segunda causa de muerte tras las enfermedades circulatorias (infartos, ictus, etcétera).
Anualmente, se diagnostican en La Rioja en torno a 1.500 casos de cáncer y los más frecuentes son el de próstata (21 por ciento); colorrectal (17 por ciento) y de pulmón (13 por ciento) en hombres y el de mama (29 por ciento), colorrectal (145) y de estómago (6 por ciento) en mujeres.