El Tribunal Supremo de la India está considerando un nuevo intento de la empresa Vedanta Resources, que cotiza en el principal índice de valores de la bolsa londinense, para conseguir que su mina de bauxita en el estado de Orissa (India) reciba luz verde.
El pasado mes de agosto la mina fue bloqueada en una decisión sin precedentes, después de que investigadores independientes determinaran que “destruiría” al pueblo indígena dongria kondh, que vive en la zona. La comunidad organizó una campaña internacional de gran éxito para salvar su hogar, y logró el apoyo de personalidades como el ex Monty Python Michael Palin y la actriz Joanna Lumley.
El Gobierno de Orissa siempre ha apoyado la mina de Vedanta, y ahora ha pedido al Tribunal Supremo que anule la prohibición a través de la empresa Orissa Mining Corporation (OMC), propiedad del estado de Orissa. La OMC había firmado previamente un acuerdo con Vedanta para construir la polémica mina.
Vedanta Resources planeaba usar la mina para alimentar su refinería de aluminio, situada en las proximidades. En octubre del año pasado se obligó a la empresa a paralizar la expansión ilegal de la refinería, que la haría seis veces más grande, pero Vedanta ha recurrido esta decisión ante el Tribunal Superior de Orissa. Aunque el caso concluyó el 28 de febrero, el veredicto permanece reservado.
La mina de Vedanta fue bloqueada el mismo mes en que dos de los líderes dongria kondh más activos en la oposición al proyecto en su territorio fueron secuestrados y apaleados por hombres que, según ellos, eran policías de paisano.
El mismo mes en el que se prohibió la construcción de la mina, se desplomó el valor de las acciones de Vedanta. Desde entonces se ha mantenido bastante por debajo de la media que registra el índice del sector minero del FTSE 350 lo que ha supuesto pérdidas millonarias para sus inversores.
El director de Survival International, Stephen Corry, ha dicho: “Los dongria kondh no quieren esta mina, que destruiría las vidas de muchos de ellos. ¿Querrá el Gobierno de Orissa dejar de apoyar a una empresa minera británica valorada en miles de millones de dólares, y empezar a proteger a sus propios ciudadanos?”