La Policía Nacional ha advertido en sus redes sociales que los ladrones están utilizando hilos escondidos para detectar posibles casas vacías para robar después.
Colocan hilos con pegamento entre el marco y la puerta y, según alerta la Policía, son más difíciles de detectar que los testigos de plástico. Si pasan varios días y no se han roto, significa que nadie ha entrado y que la vivienda está deshabitada o los inquilinos están fuera.