Las autoridades francesas elevan a seis el número de coches robados en el taller de vehículos de segunda mano y que podrían ser hasta diez los presuntos miembros de ETA implicados en el incidente que acabó con la muerte de un gendarme francés en la localidad al sureste de París de Dammarie-les-Lys, según fuentes de la investigación.
“Pensamos en un 'comando' de al menos seis personas, puede que diez, entre ellas una mujer, porque había seis vehículos robados”, aseguraron estas fuentes. Tras el incidente, que tuvo lugar pasadas las 19.00 horas fue detenido Joseba Férnández Adurz, huido por actos de kale borroka.
Según estas fuentes, los presuntos etarras acababan de salir de un concesionario de vehículos donde habían robado, amenazando con un arma, media docena de vehículos, dejando al gerente y los empleados en estado de shock. El conductor de uno de los vehículos robados pasaba por un cruce a alta velocidad, en un pueblo cercano, cuando una patrulla de la comisaría local intentó proceder a un control. Sin embargo, otros vehículos llegaron por detrás y sus ocupantes abrieron fuego contra los policías.
La muerte de Jean-Serge Nérin, padre de cuatro hijos y de 52 años se trata del primer asesinato de ETA a un miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad galas. Aunque llevaba un chaleco antibalas, el proyectil mortal le pasó bajo la axila y le llegó al tórax.
BUSCAN AL RESTO DEL COMANDO
El ministro del Interior francés, Brice Hortefeux, se desplazó al lugar del incidente por la noche e instó a los policías a “cumplir su misión en el servicio de la seguridad de sus conciudadanos pero pensando en su vida, en su propia seguridad y en la de su familia”.
Los otros miembros del comando están siendo buscados aún el miércoles por la policía francesa. Los investigadores han incautado del arma del presunto autor de los disparos, un revolver de cañón corto.