El primer ministro de Estonia, Andrus Ansip, pidió este miércoles el apoyo del gobierno de España para sus planes de entrar en la Eurozona “lo antes posible”, según adelantó el mismo en una declaración junto al jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, antes de reunirse con él en el Palacio de la Moncloa.
Ansip dejó claro, no obstante, que su gobierno se propone cumplir con los llamados criterios de Maastricht y que no pretende lograr ninguna “excepción” para acceder a la moneda única, porque recurrir a excepciones implicaría “no tener una zona euro fuerte”.“Queremos una UE fuerte y pensamos que el Tratado de Lisboa va a permitir que así sea, y queremos que la Eurozona sea también fuerte”, aseguró.
Así, admitió que “el principal reto” para su país es cumplir el objetivo de déficit que marcan los criterios de Maastricht, según los cuales el déficit público debe quedar por debajo del 3% del PIB, pero se mostró “completamente seguro” de que va a conseguirlo. El propio comisario europeo de Asuntos Económicos, Joaquín Almunia, afirmó recientemente que Estonia podría ser el primer país báltico en sumarse a la eurozona en 2011, si sus ciudadanos lo aprueban en referéndum el próximo junio.
Ansip se reunió con Zapatero en Madrid
en el marco de los contactos que éste está manteniendo con sus homólogos para preparar la presidencia española de la UE que comienza el 1 de enero.
El presidente del gobierno español, por su parte, adelantó que en la reunión le expondría a su colega los principales objetivos de la presidencia española de la UE en materia económica y de política exterior, especialmente en lo relativo a la estrategia de la Unión para el Báltico y la Asociación Oriental.
Un día después de la entrada en vigor del Tratado de Lisboa, Zapatero confió en que la aplicación de éste “comience bien” y sirva para darle a la Unión “más fuerza, más vitalidad más, energía y más capacidad de decisión”. Con ese objetivo, aseguró, trabajará la presidencia española, con el fin de convertir a la UE “en una palanca decisiva en la recuperación económica ante la grave crisis que padecemos”.
Para lograr ese propósito, continuó, es necesario una mayor coordinación entre los poderes europeos y que todas las instituciones demuestren su liderazgo. Su invitado le deseó éxitos a la próxima presidencia española, destacando además que será el primer gobierno que liderará la UE con el nuevo Tratado.
Por otro lado, Zapatero expresó su deseo de mejorar las relaciones bilaterales con Estonia,
sobre todo desde el punto de vista económico y comercial, y apuntó que, a pesar de ser dos países en los dos “extremos” de la UE, hay ámbitos donde es posible mejorar esa relación.