La Reserva de la Biosfera de La Rioja recibirá el próximo miércoles, 11 de julio, el reconocimiento que le distingue como destino turístico Starlight por la calidad de su cielo nocturno para la observación del firmamento y la adecuación para utilizar sus recursos astronómicos para captar visitantes y poner en marcha actividades ligadas al turismo de naturaleza.
El director general de Calidad Ambiental, José María Infante, ha destacado que La Rioja es “una de las primeras comunidades autónomas en recibir esta distinción, que está avalada por la Unesco, y que puede suponer un fuerte impulso al desarrollo turístico sostenible de la Reserva de la Biosfera de los Valles del Leza, Jubera, Cidacos y Alhama y de los 40 municipios riojanos que la componen”.
La Fundación Starlight de la Unesco hará entrega de la mano de su presidente y también director del Instituto de Astrofísica de Canarias, Francisco Sánchez, de esta certificación al consejero de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente, Íñigo Nagore, en un acto que se celebrará en la Bodega Institucional de La Grajera.
La entrega de la certificación como destino turístico Starlight se completa con una jornada que incluye diferentes ponencias que abordarán los beneficios turísticos y medioambientales que conlleva la concesión de esta distinción.
El coordinador de la iniciativa Starlight y miembro del Comité del Urban Futures Programme (Unesco-MaB), Cipriano Marín, hablará sobre la necesidad de conservar y proteger el cielo estrellado como parte del territorio; mientras que el director general de Calidad Ambiental, José María Infante, detallará los objetivos y la evolución del Plan de Acción Starlight de la Reserva de la Biosfera.
En un segundo bloque, la jornada se centrará en el turismo de estrellas. El gerente de Sepinum, Julio Grande, se detendrá en cómo ser destino Starlight abre nuevas oportunidades para desarrollar el turismo en esta zona de La Rioja. Por su parte, el presidente de la Agrupación Astronómica de La Rioja y profesor de la Universidad de La Rioja, Víctor Lanchares, realizará una aproximación a la astronomía.
Previamente, en la noche del 10 de julio, se ha organizado una salida para observar el firmamento. La actividad, que se llevará a cabo a partir de las 22.30 horas en el molino de viento de Ocón por parte de los responsables de la Agrupación Astronómica de La Rioja, está abierta a todos los interesados que quieran acudir a este emplazamiento dentro de la Reserva de la Biosfera. Para ello deben reservar su plaza a través del correo electrónico reserva.biosfera@larioja.org o en el teléfono 941 291100 (ext. 4599).
El Gobierno de La Rioja solicitó el año pasado, a través de la Dirección General de Calidad Ambiental, el reconocimiento de la Reserva de la Biosfera de los Valles de Leza, Jubera, Cidacos y Alhama como destino turístico Starlight. Para ello, presentó un Plan de Acción, que fue debidamente auditado y analizado por la Fundación Starlight y en el que quedó patente la calidad del firmamento para la observación astronómica en la Reserva de la Biosfera.
El criterio exigible para optar a destino turístico Starlight es disponer de un brillo del cielo nocturno de fondo de 21,0 mag/as2, objetivo que se alcanza en la mayor parte de la Reserva Biosfera y que justifica que prácticamente todo este territorio sea destino turístico Starlight.
Asimismo, el Gobierno de La Rioja ha presentado su candidatura para que la Reserva de la Biosfera sea reconocida como Reserva Starlight por su compromiso con la defensa de la calidad del cielo nocturno y con la preservación de los valores culturales, científicos, astronómicos, paisajísticos y naturales vinculados con la astronomía.
El objetivo del Gobierno de La Rioja es la protección y recuperación de un cielo estrellado no contaminado por la luz artificial, ya que considera que un cielo bien conservado es un recurso con capacidad para atraer un turismo sostenible y redunda en una mayor eficiencia en el alumbrado exterior.
No obstante los criterios exigibles en este caso son más restrictivos ya que se exige un brillo nocturno de valores superior a 21,5 mag/as2, de los cuales se alcanzan valores próximos en la zona núcleo de la Reserva de la Biosfera, además de la consolidación de un Plan de Acción, muy encaminado a la disminución de la contaminación lumínica, el cual ya está elaborado y, en breve, puesto en ejecución.