Tan cerca, tan lejos. El equilibrio existente se rompió en los últimos 5 minutos. Cuando las fuerzas se debilitaron y cuando la cabeza iba a más velocidad de la que debía. El Campus Promete trabajó para recuperar la senda victoriosa, pero después de dos prórrogas cedió ante un rival, el IDK Gipuzkoa, que lucha por escapar de la zona baja y que ha dado caza a las riojanas en la tabla. De poco sirvió la superioridad en el rebote cuando el desacierto aumenta y no se está atinado desde la línea de personal en el momento clave. Así puede entenderse el 77-68 tras 50 minutos.
Los nervios iniciales de las riojanas provocaron que el IDK Gipuzkoa se pusiera 4-0, aunque un parcial de 0-5 evitaba la escapada de las vascas. La fuerte presión de las visitantes generó que el ritmo de juego fuese bastante rápido por parte de ambos conjuntos, aumentando las idas y venidas. Juana Molina y Paula Estebas, alternando la dirección del juego riojano, lograron desatascar a su equipo con el 11-13 que tuvo su continuidad al término del primer cuarto: 13-15.
El Campus Promete insistía en su trabajo para continuar dominando pese a que las locales Bravard y Novo respondían a las acciones de las riojanas. El 23-25 en el ecuador evidenciaba que los ataques estaban siendo imprecisos y que si había cierta continuidad en el ataque se podía romper el partido con un buen parcial favorable. Pero la tónica no varió mucho. Las abundantes pérdidas de las pupilas de Andreu Bou propiciaban que Gipuzkoa estuvieron muy cerca en el electrónico porque los guarismos anotadores eran bajísimos. Que el tercer cuarto acabar 38-41 motivaba a las locales, que seguían con vida debido a los errores de las riojanas, espesas en ataque.
Demasiados errores en ataque
El 40-45 invitiba al optimismo. Sin embargo, el tiempo muerto que solicitó Aranzazu Muguruza fue clave para que las locales voltearan el marcador a poco menos de tres minutos para el final: 52-51. Por suerte, el Campus Promete, pese al desacierto general, tuvo arrestos para forzar la prórroga tras el empata a 54. Vuelta a empezar. Así fue porque Gipuzkoa exprimió que ambos conjuntos estuvieran en bonus para poner un inquietante 64-59. Por suerte, apareció Covington, desde la personal, y Paula Estebas, con un triple, para empatar a falta de 19 segundos (66-66). Además, las locales no estuvieron finas en su posterior ataque, por lo que se debían disputar otros 5 minutos.
El IDK Gipuzkoa llegó más entero a este tramo. El cansancio afectó más a las riojanas, que cometieron varias personales, facilitando los tiros libres de su rival, y estuvieron desacertadas en ataque fallando varias acciones. Tanto que el 11-2 de los últimos 5 minutos fueun excesivo castigo para un Campus Promete que desperdició una gran oportunidad de quebrar su racha adversa de resultados y de escapar de la parte baja de la tabla.
IDK Gipuzkoa: María Erauncetamurguil, Oumoul Sarr (19), Cierra Bravard (23), Aranzazu Gómez Novo (16), Laura Arroyo (2), Iulene Olabarria (8), Onintza Aduriz, Lara González (5) y Miriam Forasté (4).
Campus Promete: Ana-Marija Begic (5), Amaya Gastaminza (5), Oumoul Thiam (7), Azania Stewart (2), Elena Salcedo (2), Paula Estebas (6), Juana Molina (6), Jazz Covington (15), Marta Tudanca y Leslie Knight (20).
Parciales: 13-15, 10-10 (23-25 al descanso), 15-16 (38-41), 16-13 (54-54 tras el cuarto acto), 12-12 (66-66 tras una prórroga) y 11-2 (77-68 después de dos prórrogas).
Árbitros: José María Terreros y Jorge González.