La situación de la donación de sangre y, más en concreto, de la Asociación de Donantes de Sangre de La Rioja (ADONAR) lleva varios meses en el punto de mira, tras la brecha abierta en sus relaciones con el Gobierno de La Rioja. Ahora es el Grupo Municipal de Cambia Logroño quien pone el foco en este asunto reclamando, mediante una moción que se presentará en el pleno de marzo, que el Ayuntamiento se manifieste al respecto. Plantean en su documento la necesidad de una mayor transparencia, la dotación de recursos económicos y la reconversión del servicio a la gestión pública.
Según ha explicado el portavoz de Cambia, Gonzalo Peña, la moción se justifica en que “Logroño es el núcleo principal” para las donaciones de sangre en la comunidad. Les gustaría pedir al pleno que el Consistorio inste al Gobierno regional, que es quien tiene las competencias, a tomar medidas al respecto. Sin embargo, ante la perspectiva de que puedan rechazarles la moción como han hecho con otras en la misma línea, se limitarán a pedir un posicionamiento por parte del Ayuntamiento.
Respecto a la petición de transparencia, en primer lugar, Peña ha argumentado que “se ha demostrado la gravedad de la opacidad con la que se está funcionando”, con una ausencia de datos, más allá de las donaciones anuales, que se viene dando desde que la Fundación Rioja Salud se hizo cargo.
“No hay datos de dónde va la sangre, de si se usa o no y con qué fines, no se conoce nada del archivo de datos, hay una opacidad total”, ha criticado Gonzalo Peña, quien ha lamentado que La Rioja ha pasado de ser la tercera comunidad en donaciones en 1993 a ser la número 14 en 2014, con 10.556 donaciones al año.
Una circunstancia que se debe, ha dicho, “más al crecimiento de otras comunidades”, y que ha ligado a los recursos económicos. En sus palabras, ADONAR tiene una deuda, por diversos conceptos, de unos 150.000 euros, “que procede de no firmar en 2013 el convenio con el Gobierno de La Rioja, con lo que dejó de existir partida presupuestaria para la asociación”.
El convenio, ha recordado, no se firmó al argumentar ADONAR porque, entre otros aspectos, se contaba con menos datos de las donaciones, se ponían obstáculos para hablar con los medios de comunicación y, en general, “por la falta de diálogo del PP”. Algo que se demostró, incluso, “en la devolución de la Medalla de La Rioja”.
“En lugar de tener sensibilidad con la asociación, desde el Gobierno de La Rioja se intentó primero fagocitarla y luego, ahogarla económicamente”, ha dicho Peña, por lo que ha considerado que el Ejecutivo debe habilitar una partida presupuestaria para que la entidad cuente con independencia para desarrollar su labor“.
El tercer punto de la moción se centra en “la reconversión a la gestión por un sistema público”, en lugar de hacerlo a través de la Fundación Rioja Salud, “que está funcionando como una oficina de empleo”. “El Banco de Sangre que depende de la Fundación debe tener gestión pública y sus trabajadores, concurrir por oposición”, ha finalizado.