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Casi 13.000 personas pasaron el año pasado por las actividades municipales de educación medioambiental

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Casi 13.000 personas pasaron el año pasado por las actividades de educación medioambiental organizadas por el Ayuntamiento de Logroño, según los datos facilitados este lunes por la concejala responsable de este departamento, Concha Arribas.

En rueda de prensa, la edil ha apuntado que los objetivos que persigue el Consistorio con la educación para la sostenibilidad se centran “en lograr que los ciudadanos tengamos conciencia del medio ambiente que nos rodea”.

Ha recalcado que “todavía hay gente, la menos, que da malos usos a nuestro medio ambiente, con la utilización indebida de los juegos infantiles o de los bancos y el mobiliario urbano, arrancando macizos de plantas o abandonando en las calles las heces de sus mascotas”.

Es contra estos usos precisamente, contra los que va dirigida la educación medioambiental, que “es por lo general, bien recibida por los ciudadanos, que apoyan la presencia de las educadoras ambientales”, un servicio “indispensable y necesario” para un 84 por ciento de la población.

Esta cifra se arroja a raíz de encuestas a pie de calle realizadas por las propias educadoras y por los aún existentes controladores de parques. En esta encuesta, además, se apunta que un 9 por ciento de los logroñeses “se involucran en dar soluciones a los problemas del medio ambiente de la ciudad”.

Sólo un porcentaje muy pequeño “que no llega al 2 por ciento” son los que se desentienden “y llevan a cabo actitudes que no son las correctas, y es sobre estas personas sobre las que principalmente hay que actuar”.

En este sentido, Arribas ha incidido en que los mayores problemas “se han encontrado entre los dueños de las mascotas”, una circunstancia que ha propiciado, en esta legislatura, “la modificación de la Ordenanza de Tenencia de Animales”, que se llevará a un próximo pleno.

Por lo demás, la edil ha subrayado que las actuaciones en educación ambiental se han desarrollado en campos como 'la senda del agua', las visitas a la ETAP -unas 700 pese a estar cerrada por obras-, la estación depuradora de aguas residuales -400 visitas sólo por parte municipal-, o el programa escolar 'Unidos por el agua', con 600 alumnos de 6 centros de la ciudad.

Igualmente, el área de parques y jardines ha contado con 2.000 visitantes, “con un incremento del 20 por ciento”; el aula didáctica 'Miguel Delibes' en La Grajera ha registrado casi 7.500 visitas; diversas campañas de concienciación; la apertura en mayo del Punto de Lectura del Parque del Carmen; la red de puntos limpios y Ecobús, con 2.500 participantes; o las 307 ayudas para nuevas bicicletas.

“Esta cifra, casi 13.000 personas sin contar con la gente que ha hablado con las educadoras o las actividades en comercios y asociaciones de vecinos, dice que los ciudadanos de Logroño están muy concienciados, son respetuosos, quieren ayudar y participar y admiten de buen grado que se les llame la atención sobre las malas prácticas”, ha apuntado.

CONTROLADORES Y EDUCADORAS

Por otro lado, Arribas ha aprovechado la ocasión para aclarar que la figura que va a desaparecer el próximo mes de mayo es la de los controladores de parques, desempeñada en este momento por cuatro trabajadores que van a pasar a realizar otras actividades dentro de la empresa encargada, Eulen.

“Desaparecen por una circunstancia económica”, ha explicado la concejala, quien ha detallado que el problema es que este servicio era una mejora del pliego de adjudicación de parques y jardines, “que había que pagar aparte”. Tras finalizar el año pasado una subvención con este fin de la Fundación Biodiversidad, “el coste no era asumible”.

Sin embargo, Arribas ha querido dejar claro que sí van a continuar con sus tareas las cuatro educadoras ambientales que, en este momento, están trabajando en la ciudad “y que no suponen ningún coste añadido, porque están dentro del contrato de adjudicación”. “Esperamos que, con una economía más boyante, se puedan recuperar los controladores”, ha concluido.