El arco Puente Mantible se reconstruirá siguiendo la técnica de anastilosis. Para ello, se recuperarán todas las piedras originales del arco que sea posible para combinarlas con piedras nuevas, correctamente diferenciadas como marcan los protocolos de Patrimonio, sujetadas sobre una cimbra.
Las piedras se colocarán según un informe arqueológico que se puede realizar ya que se disponen de fotografías desde el siglo XIX en la que se puede ver la posición original de las piedras.
Esta intervención se llevará a cabo entre marzo y abril a través de un contrato menor. Después “se licitarán las obras y los plazos irán ajustados”, por lo que, como ha garantizado, “a lo largo del verano tendremos obras en Mantible”. El plazo de ejecución de las obra será de 6 a 10 meses y “aunque nos meteremos en el periodo inundable del río, en ese momento ya contaremos con intervenciones hechas en los dos márgenes”, ha afirmado Calonge.
“Cabe destacar que las obras se llevarán a cabo en verano con apenas unas semanas de retraso con respecto a la idea original”, ha señalado el concejal de Patrimonio y Centro Histórico, Adrián Calonge. La intervención, que antes del colapso del arco tenía un importe máximo de licitación de 703.460,80 euros, no sufrirá grandes variaciones.
El resto del proyecto, en lo que respecta al estribo y a la conocida como pila 2, se mantendrá en general como el proyecto previsto antes del colapso el pasado 24 de enero. Es decir, se taparán las grietas y la zona de la fisura con el arco. Además, se eliminará la vegetación con el sellado de las oquedades.
La conocida como la pila 2 es la que más preocupa. Se va a realizar un análisis de las oquedades y de los estratos del terreno, para lo que se precisará de la intervención de buzos. Es previsible que se mantenga el rellenado del terreno y la colocación de tirantes de acero, que estaban previstos.
Asimismo, “se mantiene también, como originalmente estaba previsto, el análisis de los morteros y las maderas que lo componen para con la prueba del caborno14 determinar, si es un puente medieval o romano”, ha señalado Rubén Antoñanzas.
En cuanto el riesgo que sufren los elementos del puente que se mantienen, Adrián Calonge ha explicado que la pila se ha asentado, aunque ha reconocido que “corre peligro”. Por ello, se están analizado las oquedades de la base de la construcción y las grietas están siendo monotorizadas.
El concejal regionalista ha adelantado que “en el entorno, se intervendrá haciendo un mirador para observar los restos y la rehabilitación del camino de acceso, cartelería, pero más adelante informaremos detalladamente”.