Para el alcalde se trata de una “estupendísima noticia” con la que se consigue “hacer realidad la ciudad que queremos, abierta, tolerante, respetuosa con las tradiciones, con las creencias y con las religiones”.
Para el primer edil esta actuación cumple con la “obligación legal” de las administraciones públicas de “ofrecer servicios a todos y cada uno de los ciudadanos”, con independencia de su raza, credo o religión, según recoge la Constitución Española.
En la actualidad, la población inmigrante se cifra en 22.619 personas, lo que supone el 14,79% de los habitantes en Logroño, un total de 152.928, de acuerdo a los datos oficiales.